Ya está aquí el sindicato impulsado por Vox: Solidaridad. La formación de derecha radical lo ha presentado este jueves a bombo y platillo, a través de un vídeo en el que dejan bien claras sus intenciones desde el primer segundo.
En su presentación, el sindicato se marca como objetivo combatir el paro, la crisis, la deslocalización y la desindustrialización, pero también Bruselas (sede de la Unión Europea), la inmigración ilegal, los falsos autónomos, la "agenda globalista" y hasta "el ecologismo progre".
El vídeo, que ayer cerró la jornada con más de 175.000 visualizaciones en Twitter, comienza afirmando que los trabajadores españoles han sido "abandonados por el Gobierno" y "traicionados por sindicatos corruptos". Estas afirmaciones se ilustran con imágenes del Ejecutivo de PSOE y Podemos, así como con mariscadas de dirigentes sindicales en Andalucía.
"Trabajadores, autónomos y parados frente a quienes nos atacan, traicionan y abandonan. Somos SOLIDARIDAD", es el mensaje que acompaña al vídeo en el primer tuit del sindicato, que remite a una web aún en construcción.
El nombre, Solidaridad, es tomado prestado del sindicato polaco del Nobel de la Paz Lech Walesa.
Sindicato "independiente"
La creación de este sindicato, que se pretende presentar en septiembre, fue anunciada por Santiago Abascal, en un mitin realizado en La Coruña. Posteriormente, el presidente de Vox lo ratificó desde la tribuna del Congreso.
Abascal se ha empeñado en presentarlo como "un sindicato que proteja a los trabajadores, al servicio de los españoles y no de los partidos", pese a que sus impulsores son personas afines al partido.
Además, distintos diputados de Vox como Macarena Olona se han dedicado a dar difusión a Solidaridad a través de su cuenta personal de Twitter. Para más inri, la cuenta recién creada del sindicato utiliza la misma grafía que Vox en su foto de portada.
Una muestra más de la implicación entre el sindicato y Vox, por mucho que los dirigentes de la formación mayor nieguen la mayor, es que una de las sindicalistas que estará al frente de Solidaridad es Raquel Moreno Barba, concejala de Vox en Torres de la Alamadea, un municipio de menos de ocho mil habitantes que se encuentra en el valle del Henares (Comunidad de Madrid).
El nombre de Moreno, madrileña de 39 años y mecánica de profesión, aparece en los papeles fundacionales del Sindicato para la Defensa de la Solidaridad con los Trabajadores de España -su nombre extenso-.
Limitación de la huelga
Una de las medidas estrella del nuevo sindicato es, paradójicamente, la limitación del derecho a la huelga, una herramienta básica para la negociación recogida como derecho fundamental en la Constitución: "España necesita una Ley de Huelga moderna (...). Los trabajadores que no desean sumarse a la huelga han de poder trabajar si así lo desean".
Solidaridad también apuesta por saltarse los convenios colectivos en pactos individuales: "Las empresas han de poder descolgarse de los convenios de ámbito superior, los trabajadores individuales han de tener la opción de descolgarse de cualquier convenio y acordar con el empleador su remuneración y condiciones de trabajo".
No se trata de la primera vez que un partido político intenta capitalizar el obrerismo. La nueva estrategia política de Vox busca ampliar sus bases electorales atrayendo a los estratos más bajos, tradicionalmente asociados a la izquierda.
Ahí se encuadra el último movimiento de los verdes: tanteando distintos ámbitos económicos para preparar el desembarco de Solidaridad. Para ello, trabajan intensamente en la captación de sindicalistas experimentados que compensen la escasa penetración obrera del partido.