El PSOE blinda la inmersión lingüística en Baleares, que sigue los mismos pasos de Cataluña
Francina Armengol pretende eliminar la vehicularidad del castellano en las Islas y volver al 'statu quo' previo a José Ramón Bauzá.
6 junio, 2021 02:15Noticias relacionadas
La inmersión lingüística vuelve a las Islas Baleares. El Gobierno autonómico, que preside la socialista Francina Armengol, tiene previsto aprobar este lunes una nueva ley educativa que prioriza el catalán sobre el castellano en las aulas.
La ley, gestada en la Consejería de Educación que ostenta el PSIB-PSOE, abre la puerta a la implantación de la educación íntegra en catalán en todos los centros educativos, discriminando al castellano. La medida supone un retorno al statu quo previo al del gobierno del Partido Popular de José Ramón Bauzá (2011-2015), que suprimió esa política educativa.
La Ley de Educación consigna que "la lengua catalana, propia de las Islas Baleares", será "la lengua vertebradora de la enseñanza". Una especificidad que no es extensiva a la otra lengua cooficial, el castellano, lo que viene a contravenir las tres sentencias dictadas por el Tribunal Constitucional en este sentido.
La oposición considera que estamos ante una cesión de los socialistas a Més per Mallorca, socios del Govern balear, pero las fuentes consultadas por este medio apuntan a que el propio PSIB es "nacionalista". En cualquier caso, Armengol seguirá la estela catalana y la de la ministra de Educación, Isabel Celaá, eliminando la vehicularidad del castellano en las aulas y blindando la inmersión lingüística.
"Un retroceso"
La situación no es nueva en las Islas Baleares. "Cuando yo llego e impulso el sistema educativo trilingüe, no había habido ningún político que hubiera legislado en favor de la libertad de educación y en contra del nacionalismo catalán", señala Bauzá en conversación con EL ESPAÑOL.
El ahora eurodiputado recuerda que desmontó "la estructura catalanista" y eliminó el catalán "como requisito de acceso a la Administración". Y lo hizo sin el beneplácito del Partido Popular, al que acusa de "connivencia con el nacionalismo": "Cuando yo intento poner en marcha el trilingüismo, la máxima presión no fue sólo de la comunidad educativa, catalanizada, sino de mi propio partido, que me pidió ceder a las presiones de las manifestaciones para renegar de mi compromiso electoral". "Me decían que estaba generando crispación... ¡El mismo discurso que el de la izquierda", denuncia el hoy político de Ciudadanos.
Por todo ello, Bauzá no habla de "novedad", sino de un "retroceso" que es "inconstitucional" y que "discrimina a los castellanohablantes". Pero no se da por vencido y asegura que hará todo lo que esté en su mano "para conseguir que la libertad educativa se cumpla en base al derecho constitucional que tenemos todos los españoles".
La nueva ley educativa balear viene acompañada del anuncio del Ejecutivo de Francina Armengol de modificar la Ley del Comercio para obligar a las tiendas con más de tres empleados a atender en catalán. Otra norma que en su día eliminó Bauzá.
"Es una aberración", adelanta el expresidente balear, que ve en la medida "una forma soslayada, escondida, de promover y facilitar la contratación de nacionalistas en los nagocios de particulares". "Es terrible que se promueva este tipo de infiltración desde las instituciones públicas", denuncia.
Pero tal y como afirma, el nacionalismo campa a sus anchas en las Islas Baleares desde hace tiempo, con el "beneplácito" de Francina Armengol y la "connivencia" del Partido Popular.
"Hay que entender que cualquier milímetro cedido a un nacionalista es un milímetro de no retorno", avisa Bauzá, que llama a "arrancar de raíz el germen separatista de la Educación para que no haya generaciones educadas en la exclusión y el odio a España".
"Crear una tribu"
La comunidad balear sigue, en este sentido, los pasos de Cataluña. Actualmente, el 93% de centros de Infantil y el 80% de centros de Primaria no cumplen con el imperativo legal de horas lectivas. Así lo denuncia Profesores Libres de Ingeniería Social (PLIS), una asociación de profesores de Baleares que reivindica una escuela "abierta, de carácter académico y orientada por parámetros educativos".
Su vocal, Olga Ballester Nebot, señala que "desde hace 30 años en Baleares hay una inmersión lingüística absoluta" facilitada tanto por PSOE como por PP y que, por tanto, la nueva ley no trae consigno ninguna novedad radical. A excepción de un matiz significativo.
"Todo va a seguir igual porque de facto ya hay inmersión lingüística, pero la ley abunda en que esta inmersión ya no solo se da en los centros educativos, sino que se tiene que dar también en las comunidades", explica Ballester.
¿En qué se manifiesta esto? "Todo el ocio de los centros educativos de cara al exterior tiene que ser en catalán: barrios, asociaciones juveniles... Es un intervencionismo de la educación que trasciende el ámbito familiar", explica.
Y es que lo que el nacionalismo pretende, en opinión de la profesora, es utilizar la "imposición" del catalán para "crear una tribu": "La ley extiende sus tentáculos a toda la vida social del alumno".