Bea Fanjul: "Se me caía la toalla en la playa; Almeida me regaló un poncho y ya no corro peligro"
"Me cuesta tirar todos los bañadores que se me han ido quedando pequeños" / "Veraneo en Cantabria, mi lugar favorito" / "No quiero saber nada de Irene Montero hasta septiembre".
12 agosto, 2021 02:51A Bea Fanjul le quitaron muy pronto la paga. Probablemente fuera en verano. Se ganaba su dinerillo dando clases de ajedrez y como relaciones públicas de una discoteca. Hoy es diputada del PP por Vizcaya y presidenta de las Nuevas Generaciones de su partido.
Por si no fueran lo suficientemente arriesgados sus últimos discursos, se ha propuesto aprovechar las vacaciones para hacer paracaidismo y encerrarse en una jaula con tiburones blancos.
Dice que no quiere saber nada de Irene Montero hasta septiembre, pero le pueden las ganas. Acaba reconociendo que desea un rifirrafe con ella en el Congreso como sólo se desean los veranos. Su primer ligue duró más que la última cumbre entre Joe Biden y Pedro Sánchez.
¿Cuáles han sido sus chanclas más horteras?
Las que tengo ahora, un moderneo absurdo. Rosas, de Nike, cual deportista de élite -sonríe-.
¿Y el bañador que más le costó tirar?
Todos los que se me han ido quedando pequeños.
Un lugar en el que no volvería a veranear jamás.
Veraneo en Cantabria, mi lugar favorito, pero es cierto que no me gusta repetir lugares que ya he visitado, sobre todo habiendo tantos rincones maravillosos que conocer en España.
El destino de veraneo que más feliz le ha hecho.
Conil, con mis amigas. El sitio, la compañía y esa semana fueron inolvidables; claro que tenía 18 años e hicimos lo propio de esas edades...
¿Qué le diría hoy a su primer ligue de verano?
Le prometería que, desde luego, nuestro idilio iba a durar mucho más que el paseo de Sánchez y Biden.
Su mayor locura en una playa.
La que quiero hacer este verano: bañarme en una jaula con tiburones blancos.
¿Y en la montaña?
Saltar al vacío desde setenta metros de altura haciendo goming.
¿Se pondría mascarilla en una playa nudista?
Lo que las reglas del juego marcasen.
Lo mejor y peor que le ha pasado yendo de campamento.
Nunca fui de campamento, pero vengo de una familia numerosa, así que podría decirse que mi familia en sí es un campamento todos los días.
El sitio más incómodo en el que se le ha caído la toalla.
Incontables veces después de pegarme un baño, pero ya no me volverá a pasar. Martínez-Almeida me regaló por mi cumpleaños un poncho surfero con el que ya no corro peligro.
¿Es más fácil veranear siendo de derechas?
Todos tenemos derecho a pasar unas vacaciones con amigos o familia, no es una cuestión de izquierdas o derechas.
Una canción del verano que todavía escuche.
Verano Azul.
En el verano se compran cosas absurdas. ¿Qué compra usted?
Todas las colchonetas que te puedas imaginar.
¿Alguna vez ha comprado en el top manta?
Supongo que sí, de niña compraría algún CD.
¿Le gusta la sangría?
No me gusta, me flipa.
Lo peor del verano del político es…
Cuando desaparece tu intimidad. Lo bueno es que la mayoría de personas es muy respetuosa.
Lo mejor del verano del político es…
Lo mismo que el de cualquier persona: intentar desconectar, descansar, recargar pilas y pasar rato con la familia y amigos.
¿Alguna vez ha llegado a las manos con alguien?
Sí, hace muchísimos años, por defender a mi hermana.
Qué libros va a aprovechar para terminar.
Aún no he decidido cuál voy a leer, pero sí tengo claro que quiero darle un buen empujón al libro que estoy escribiendo con la editorial Ciudadela. A ver si lo termino de una vez.
¿Va a pasar algún día con un adversario?
Hay vida más allá de la política.
¿De quién no quiere saber nada hasta septiembre?
De Irene Montero, aunque es un sentimiento encontrado. Llevo esperando más de nueve meses que comparezca ante la Comisión de Violencia de Género.