El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha dejado claro que no va a dimitir tras conocerse que la agresión homófoba en Malasaña era falsa y después de señalar a Vox y PP de "jugar al límite" frente a los delitos de odio. "La única responsabilidad que asumo es la de trabajar y seguir trabajando mucho", ha dicho, cerrando la puerta a cualquier cese o dimisión como exigen PP, Ciudadanos y Vox.
Marlaska ha explicado que se enteró de que la denuncia era falsa "ayer a media tarde" cuando el denunciante "modificó su declaración". Hasta entonces, ha explicado el titular de Interior, no tenía ninguna información sobre el caso, justificando así sus declaraciones en los medios de comunicación horas antes de conocerse la noticia y en las que señalaba a la derecha por frivolizar sobre el caso. "Yo nunca instrumentalizo algo tan importante como los derechos fundamentales", ha apuntado.
"La Policía no me informó de sus sospechas. Había muchas hipótesis y estas investigaciones son complejas", ha explicado Marlaska, que ha insistido en que no tuvo información sobre la denuncia falsa hasta la media tarde de este miércoles. "En cuanto lo supimos, el Ministerio del Interior dio la noticia y expuso lo que estaba aconteciendo", ha añadido.
"No he señalado partidos"
Marlaska no sólo descarta dimitir, también ha negado que haya señalado a partidos políticos. "He señalado determinadas declaraciones políticas, públicas y en redes sociales que generan un caldo de cultivo para que se cometan actos como los indicados", ha afirmado, sin nombrar a Vox y PP.
"Tenemos un problema de discursos políticos donde se señala a algunos colectivos por su condición sexual. Hay un problema con los discursos políticos y hay que hacerle frente", ha advertido.
En este punto, ha opinado que "me parece grave que banalicemos algo tan importante como estos hechos", que implican, ha continuado, "un ataque a la base de la democracia como son los derechos humanos y la dignidad de las personas" cuando los delitos de odio aumentan en España.
"Pido responsabilidad"
Así, el ministro del Interior ha pedido que "no individualicemos un hecho", en referencia a una denuncia falsa, porque hacerlo implicaría "banalización" y una "gran imprudencia". Además, cree que esta denuncia "ha dañado al colectivo" por lo que ha reclamado "responsabilidad" a medios de comunicación, políticos y ciudadanos sobre esta cuestión.
"Me preocupa que esto se relativice y que se ponga en duda de que tenemos una realidad de que aumentan los delitos de odio", ha continuado Marlaska, que ha pedido no olvidar que han crecido este tipo de delitos "un 10%". "Tenemos denuncias todos los días y hay detenciones", ha señalado.
"Pone en la diana a Vox"
Las declaraciones de Marlaska en los días previos a conocerse la falsa denuncia son para Vox un claro señalamiento a su partido y a sus votantes. A estas "difamaciones" ha respondido este jueves el secretario general del partido, Javier Ortega Smith, que ha acusado a Fernando Grande-Marlaska de "poner en la diana" a cuatro millones de españoles "acusándolos de homófobos, de nazis".
"Estamos ante un Gobierno que no cree en la presunción de inocencia ni en el Estado de Derecho", ha criticado el portavoz de Vox el Ayuntamiento de Madrid en una entrevista en Telemadrid.
Misma línea ha mantenido la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, que ha exigido a Marlaska que dimita. "Es lamentable la utilización que ha hecho el Gobierno de esto. Que un ministro del Interior señale a la oposición y diga que está generando odio... Marlaska debe dimitir inmediatamente", ha dicho este jueves en Antena 3.
"Slo un Gobierno como este puede permitirse un ministro como Marlaska. Salir a hacer arenga contra la oposición es para dimitir o cesarlo", ha añadido.