Lambán ningunea a Podemos en los Presupuestos tras acusarle de blanquear a Franco

Las aguas bajan revueltas en el Gobierno de Aragón, uno de los primeros lugares donde se ensayó la coalición entre PSOE y Unidas Podemos que luego llegaría al Gobierno de España. El partido morado acusa a la parte socialista de haber hecho un acto de "blanqueamiento" del franquismo, nada menos, por haber igualado "a víctimas y a verdugos, a los que lucharon por la democracia y a los que la inmolaron".

En esos términos se manifestaba la líder aragonesa de Podemos y consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento, Maru Díaz. Todo después de que el pasado sábado el consejero de Educación y Cultura, el socialista Felipe Faci, participase en un acto, según comunicó el propio Gobierno regional, de "resignificación del monumento de homenaje y recuerdo a las víctimas de la Guerra Civil en Cariñena". En el cementerio de ese municipio de Zaragoza había un monumento a los caídos construido por la dictadura de Francisco Franco, que el ayuntamiento ha reconvertido en un homenaje a "todas las víctimas de la Guerra Civil".

El objetivo declarado desde las cuentas oficiales en redes sociales del Gobierno de Lambán era, textualmente, "recordar a todas las víctimas de la contienda sin distinción de ideología, bando o circunstancias en las que combatieron". Para Podemos, en cambio, se trata de un acto por el que las autoridades locales "se niegan a contar la historia como fue" en la contienda civil que estalló en 1936. Fuentes de la Presidencia de Aragón aseguran que Podemos hizo una mala interpretación de un mensaje en Twitter de la cuenta oficial del Ejecutivo regional. "Está aclarado y no diremos nada más" aseguran, quitando hierro a la polémica interna. 

Sin embargo, el episodio ha tenido una repercusión directa en la negociación de los Presupuestos autonómicos, dado que la parte socialista del Gobierno llamaba este mismo martes, sin previo aviso, a los podemitas para iniciar la negociación de las cuentas aragonesas, según fuentes de Podemos.

Este movimiento apresurado ha desconcertado a Podemos. La formación que lidera Ione Belarra, acostumbrada a ser el interlocutor preferente con respecto a los otros dos socios minoritarios de Lambán, el Partido Aragonés Regionalista (PAR) y La Chunta Aragonesista (CHA), se siente ahora ninguneada. Su estatus en el Gobierno les había permitido hasta ahora recibir de manera preferente el proyecto de presupuestos en los años anteriores.  

Desde que en las elecciones de 2019 revalidase su mandado, el barón autonómico socialista ha sacado adelante los presupuestos tanto el primer año como el segundo, ya en pandemia. Este verano, Javier Lambán se mostró en las Cortes de Aragón confiado en sacar adelante las cuentas públicas e incluso en hacerlo antes de lo habitual. En el penúltimo mes del año, una piedra en el camino de su relación con su principal socio, a cuenta de una materia tan sensible para Podemos como la Memoria Histórica, podría poner en peligro esa hoja de ruta.