El Gobierno de la Comunidad de Madrid, presidido por Isabel Díaz Ayuso, quiere "atajar" cuanto antes el fenómeno de las bandas latinas, que ha aumentado considerablemente en la región. Es por eso que ha recurrido a expertos de Guatemala, Honduras y El Salvador (Centroamérica) para formar a la Policía Municipal.
Con ellos cuenta el Instituto de Formación Integral en Seguridad y Emergencias (IFISE) de la región en el cursillo que está impartiendo este jueves y viernes en la región, enfocado en la prevención, detección e intervención policial ante las bandas organizadas, grupos juveniles y sobre la seguridad ciudadana en general.
El IFISE ha contado este jueves con la especial implicación del Ministerio Público de Guatemala, que ha expuesto un estudio sobre la desarticulación de las maras (organización criminal originaria de Estados Unidos) en el denominado triángulo de Centroamérica, conocido por tener que lidiar con las bandas más peligrosas del continente. Con él, los policiales municipales han conocido mejor el origen de este tipo de fenómenos y pandillas.
También un experto de la Escuela Internacional de Criminología y Criminalística ha instruido a los agentes en la estrategia a seguir contra el crimen organizado transnacional. La jornada de este viernes, por otro lado, tendrá un enfoque más nacional y contará con expertos de la Policía Nacional y de la Policía Municipal de Madrid.
El consejero de Justicia de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, ha inaugurado estas jornadas destacando que la intención del cursillo es que "los Cuerpos de Policía Local de la región participen del intercambio de conocimientos, técnicas y experiencias con otros grupos policiales, nacionales e internacionales, estableciendo sinergias que redunden en la mejora de su labor y, por tanto, en la seguridad de los madrileños".
López ha abogado por mantener la colaboración entre administraciones para "de manera coordinada, atajar de manera eficiente este tipo de fenómenos de delincuencia juvenil". También ha destacado, eso sí, que "Madrid es un espacio seguro, pero en ningún caso debemos de bajar la guardia".
El pasado 21 de febrero, según fuentes del Gobierno regional, el consejero se reunió con la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, para analizar el repunte de la delincuencia de las bandas juveniles y de la efectividad policial alcanzada, fruto de la incautación de numerosas armas blancas, mediante un fuerte despliegue de controles.
Las bandas, en cifras
Las bandas latinas se han multiplicado en la Comunidad de Madrid en los dos últimos años, desde que estalló la pandemia del coronavirus, pasando de 1.200 a 2.500 miembros. Estos ingresan la friolera de 185.000 euros por semana en cuotas de pertenencia, sin contar robos y venta de droga. Un total de 9,6 millones al año.
Así se desprende del II Observatorio de Bandas Latinas en la Comunidad de Madrid realizado recientemente por el Centro de Ayuda Cristiano. Según el informe, estas bandas están compuestas actualmente por 2.500 pandilleros, 500 de ellos niños de entre 11 y 13 años y 1.200 entre 14 y 18 años.
Los pandilleros de entre 11 y 13 años abonan a la banda unos 5 euros a la semana, entre 14 y 18 años unos 20 euros, y a partir de los 19 años alrededor de 50 euros semanales, aunque se han identificado casos semanales de entre 200 y 500 euros por parte de los cabecillas y aquellos delincuentes profesionales.
El informe hace hincapié en cómo la pandemia ha incrementado "de manera muy considerable" el número de jóvenes relacionados con bandas, amén de que se ha adelantado la edad de incorporación y han aumentado las que son exclusivamente femeninas -las latin queens-.
Este también resalta cómo muchas pandillas hacen el "paseíllo" a la salida de los institutos "como si se trata de un partido de fútbol", cómo "crece la fama de los youtubers pandilleros en redes sociales" y cómo aparece por primera vez en España la Mara Salvatrucha y resurgen los Latin Kings. Además, el precio por abandonar las bandas suele ser 3.000 euros y/o refugiarse en la iglesia.