El PSOE justifica que Pedro Sánchez "bajara al barro" en el cara a cara para "desmontar a Feijóo"
Ferraz defiende que el presidente se enfundara el papel de candidato en el Senado para insuflar ánimos al partido y remontar en las encuestas.
8 septiembre, 2022 03:00Entre los muchos calificativos a los que recurren dirigentes del PSOE para definir a Pedro Sánchez, todos coinciden en uno: "Combativo". Ferraz admite que el presidente asumió en el Senado un papel más de candidato y "bajó al barro" en el cara a cara con el líder del PP. Pero, justifican los socialistas, era necesario para "desmontar a Feijóo".
Mientras tanto, Moncloa también respalda esa actuación del jefe del Ejecutivo: "Uno que ha empezado muy fuerte ya va para abajo y otro que estaba abajo ya va para arriba", resume una persona de confianza de Sánchez a EL ESPAÑOL para explicar la interpretación que hace del debate Sánchez-Feijóo en la Cámara Alta.
Tanto en el PSOE como en el Gobierno son conscientes de que Sánchez asumió un papel que, quizá, no le correspondía. Sobre todo, porque recurrió a un tono muy duro que le desvistió del traje institucional. Sin embargo, los socialistas creen imprescindible pasar al ataque para iniciar la remontada en las encuestas.
Según trasladan desde el partido a este periódico, el pleno del martes se saldó con numerosas llamadas y mensajes a los principales responsables del PSOE por parte de las organizaciones socialistas en otros territorios. La mayoría de ellas, relatan, eran congratulándose por el resultado definitivo.
Recobrar aliento
Y es que, días después de lo ocurrido, en el Gobierno se ha instalado la idea de que ante la larga carrera que supone el ciclo electoral del próximo año, lo prioritario ahora es recobrar el aliento y contagiar al equipo de una moral de victoria. Para esto, sostienen, Pedro Sánchez es un experto.
Recuerdan algunos ministros del Gobierno que la trayectoria política de su jefe está caracterizada por su pugna por el liderazgo del PSOE. Ese espíritu que le llevó a coger un coche en 2016 para recuperar el mando, tras verse obligado a dimitir por su rechazo a la investidura de Rajoy, es el mismo que quiere trasladar al Gobierno.
Los más cercanos al líder del Ejecutivo señalan que la pandemia del coronavirus, el volcán y la guerra de Ucrania terminaron por hacer mella en sus ánimos y que, ahora, ha decidido dar un paso al frente y arriesgar para conservar el poder tras los próximos comicios. Dando a entender que no se amilanará ante su contrincante.
Sobre el discurso en el Senado y las dos réplicas a Feijóo, el Gobierno celebra que Sánchez puso al presidente del PP "frente al espejo, dejándole en evidencia" con el lema "insolvencia o mala fe" al que recurrió para recodarle diferentes fallos que había tenido en cuestiones como la prima de riesgo que "no admiten ningún contraste riguroso".
"Desenmascarar" a Feijóo
Fuentes gubernamentales aseguran que el presidente se limitó a intentar "desenmascarar" la supuesta "moderación" de su rival. Aunque eso, en algunas ocasiones, se interpretó como que estaba haciendo de oposición a la oposición.
En el Gobierno siguen planteando que el Debate sobre el estado de la Nación supuso un punto de inflexión en el PSOE. Desde entonces, reiteran, Sánchez ha pasado a la acción junto a todos sus ministros y el aparato del partido.
Tras el capítulo en la Cámara Alta, Moncloa muestra satisfacción de haber conseguido, por un lado, que Sánchez se "dirigiera a los españoles, demostrando lo que ha hecho desde el Gobierno en tiempos tan difíciles" y que, por otro; dejara en "calzoncillos" a Feijóo, mostrando la "inconsistencia de sus propuestas".
Aunque el DEN fue el punto de partida, la idea de establecer un plan para revertir la tendencia que marca la demoscopia viene de antes, concretamente de las elecciones en Andalucía. Fue ahí cuando verdaderamente se generó la alarma en Ferraz.
Ahora, con lo que interpretan como un nuevo éxito del presidente, y con el despliegue de una campaña que le llevará a recorrer distintos puntos de España "pisando la calle", los socialistas se muestran convencidos de que están consiguiendo movilizar a los suyos.
Ferraz asegura que no hay trasvase de votos al Partido Popular, sino que el grueso de su electorado está dormido. Para ello, defienden, hay que despertarlo. Y el perfil más combativo de Sánchez con el jefe de la oposición, según ven Gobierno y PSOE, ha sido un buen paso al frente. Advierten de que es sólo el comienzo.