Moncloa afea a Irene Montero su falta de "deportividad política" por su tono contra el Gobierno
A pesar de haber escenificado su ruptura en el Congreso a causa del 'sí es sí', ambas partes consideran que no peligra la coalición.
21 abril, 2023 03:14El Gobierno de coalición cruzó su peculiar Rubicón este jueves. El ala socialista del Ejecutivo está muy molesto por los descalificativos que ha estado recibiendo estos días, concentrados todos ellos en la jornada de ayer, por parte de Irene Montero y otros dirigentes de Podemos a causa de la reforma de la Ley del sólo sí es sí.
Desde Moncloa consideran que la ministra de Igualdad ha traspasado varias líneas y no ha tenido "deportividad política" a la hora de gestionar el asunto, desagradable también para ellos, pero en el que han querido ser más comedidos. "No ha habido ninguna novedad en el debate del jueves, pero ha sido muy desagradable", admiten fuentes del Gobierno.
La reforma de la Ley del sólo sí es sí, impulsada unilateralmente por el PSOE tras no llegar a un acuerdo con Unidas Podemos, salió adelante este jueves gracias al apoyo de PP, Ciudadanos y PNV, entre otros. En contra se posicionaron los morados y socios habituales del Ejecutivo como ERC o EH Bildu.
[El Gobierno confirma su ruptura: el PSOE suma con el PP y tumba el 'sí es sí' de Irene Montero]
Durante el debate, Irene Montero subió a la tribuna del Congreso de los Diputados y desgranó una retahíla de reproches contra el PSOE. Acusó a los socialistas de aliarse con el PP para retroceder en los derechos de las mujeres, de convertir el consentimiento en un teatro y de volver al Código Penal de La Manada.
Montero tomó la palabra, a pesar de que en un inicio no estaba previsto, haciendo uso del derecho que tienen los miembros del Gobierno de intervenir en los debates cuando lo deseen.
Añadió así un elemento inédito a la situación: es la primera vez que un miembro del Consejo de Ministros pide la palabra para hablar mal del Gobierno, y para reprochar al socio mayoritario de la coalición que se apoye en la oposición para corregir los errores de su ley.
Pero unos instantes antes, ya había marcado la senda también desde la tribuna la diputada de Unidas Podemos Lucía Muñoz. Mirando a la bancada socialista, dijo: "Hoy se recorta nuestra libertad sexual". Y apuntaló, de nuevo mirando al PSOE: "Nos han entregado a los reaccionarios".
[Irene Montero habla por sorpresa "en nombre del Gobierno" y lo lleva a la derrota en el 'sí es sí']
En Moncloa no molesta que les acusen de aliarse con el PP, consideran que ese discurso es una réplica de aquellos que les señalan por pactar con EH Bildu. Pero sí les ha molestado que les acusen de ser "involutivos en cuanto a derechos de las mujeres". "Es un discurso muy duro", añaden.
Los socialistas temen, de todas formas, que el tono bronco de Podemos puede ir a más a medida que se acercan las elecciones del próximo 28-M. Creen que el partido de Ione Belarra está subrayando las diferencias con el PSOE y pronto empezarán a hacerlo con Sumar, el proyecto político de Yolanda Díaz, pero que no va a acarrear mayores consecuencias.
Esperan más beligerancia hasta mayo y que se retomará después, en la campaña electoral de las generales de diciembre.
A pesar de todo ello, ninguno de los dos partidos tiene intención de romper el Ejecutivo de coalición. Las dos formaciones tienen interés en seguir en la Moncloa hasta final de año, y más tiempo de forma interina, para terminar de sacar adelante los proyectos que tienen en mente, a pesar del ambiente irrespirable en los Consejos de Ministros.