Marruecos intercepta 80 votos fraudulentos en la frontera a dos personas procedentes de Melilla

El hecho ha tenido lugar en la aduana de la frontera con Beni Esnar. El partido que aparece en las papeletas no tiene por qué ser el responsable del fraude, ya que puede estar siendo usado para desestabilizar, explican fuentes de la investigación. Pero este diario ya adelantó en exclusiva que la Policía Nacional está investigando por esta trama a consejeros del Gobierno de la ciudad autonómica pertenecientes a la formación Coalición por Melilla (CpM).

El objetivo del hombre y la mujer que portaban los 80 votos era validarlos en oficinas de Correos de la península, en la propia Ceuta, o en la Embajada española en Marruecos. Esto se debe a que, ante las sospechas de fraude, las autoridades de Melilla requieren desde hace días que aquel que deposite el voto por correo se identifique con el DNI, lo que ha obligado a los delincuentes a buscar otras vías.

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De hecho, las autoridades españolas habían aumentado desde esta semana su presencia en la frontera y en la comunicación con la península "para evitar que salieran personas con sacas de votos para llevar a otras partes de España", aseguran desde la Delegación del Gobierno en la ciudad autónoma.

Estas dos personas sí consiguieron burlar los controles españoles y fueron interceptadas en el lado marroquí de la frontera. Las autoridades del país vecino han calificado las papeletas de "panfletos publicitarios" y las han requisado atendiendo a la ley que no permite introducir determinados libros ni publicidad en el país desde el exterior.

Las alarmas de que se podía estar produciendo un fraude para las elecciones del 28-M saltaron cuando las autoridades notaron que la solicitud del voto por correo estaba teniendo unos índices inusualmente elevados. Aunque esta modalidad es tradicionalmente alta en Melilla -en torno al 10%- para estas elecciones era del 21%: 11.000 solicitudes de 55.000 censados. A ello hubo que sumar varios robos a carteros de Correos que llevaban votos.

El 28-M sigue adelante

Ante esta situación de peligro para el proceso del 28-M, la Junta Electoral Central acordó este jueves exigir el DNI en todo el país a la hora de depositar el voto por correo. Se trata de una medida disuasoria, ya que los delincuentes no se van a registrar, y al ser de aplicación en todo el territorio se evitan hechos como el que intentaban el hombre y la mujer interceptados.

Según comentan fuentes de la Delegación del Gobierno a EL ESPAÑOL, este requisito da por desactivada la posibilidad de fraude y las elecciones se celebrarán el 28-M con relativa normalidad y sin atender las peticiones de posponerlas, a menos que un juez decida lo contrario.

Lo que las autoridades sí que vaticinan es que este año va a haber una participación más baja que de costumbre, con una abstención que puede rondar el 30%. Según el Ministerio del Interior, un total de 11.707 personas habían pedido el voto por correo, del que sólo se han ejecutado 921 votos, apenas un 7,8% de las solicitudes.

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Desde la Delegación del Gobierno aseguran que esos 921 votos validados son perfectamente legales porque ya se pedía el DNI y estaban dentro de un proceso controlado. "Sabemos que todos los que han ido a votar han entregado personalmente su voto", aseguran. "Pero se va a producir esa abstención porque esas personas que solicitaron el voto por correo y lo han vendido, ya no van a poder materializarlo", añaden otras fuentes.

El único partido que ha mostrado interés por aplazar las elecciones es el investigado Coalición por Melilla. Su líder, Mustafa Aberchán, fue condenado a dos años de cárcel y 30 meses de inhabilitación por delito de falsedad y dos delitos electorales en el denominado caso voto por correo en las generales de 2008. Aberchán es próximo a Más País y Compromís, y a través del Acuerdo del Turia, también de la plataforma Sumar de Yolanda Díaz.