Junts dice que la amnistía dará paso a la negociación "entre dos naciones, la española y la catalana"
"Nuestro futuro sólo es uno y sigue siendo el mismo: el de una Cataluña libre", ha declarado el diputado Josep María Cervera.
12 diciembre, 2023 16:55La amnistía no como final de un proceso sino como llave de una nueva época. Así interpreta Junts per Catalunya la nueva proposición de ley que el Grupo Socialista en el Congreso ha llevado este martes al Pleno de la Cámara Baja. En palabras de su diputado Josep María Cervera, una ley que es a la vez "el reconocimiento al error de haber judicializado un conflicto político".
"La amnistía ayudará a abrir una vía que antes era muy difícil, la de la negociación entre dos naciones, la española y la catalana, de tú a tú para decidir nuestro futuro", ha declarado el parlamentario. Y añade: "Nuestro futuro sólo es uno y sigue siendo el mismo: el de una Cataluña libre".
Cervera ha defendido que la Ley de Amnistía "no es ninguna medida de gracia, es una medida necesaria que surge del acuerdo entre demócratas", aludiendo al mismo discurso que lleva meses esgrimiendo Carles Puigdemont. La nueva norma, precisamente, permitirá al expresident fugado regresar a España sin consecuencias judiciales.
El Pleno del Congreso acoge este martes el debate de la proposición de Ley de Amnistía registrada por el PSOE, la primera de la legislatura, que forma parte de las condiciones de los socialistas a ERC y Junts a cambio de que apoyasen la investidura de Pedro Sánchez. La votación no se producirá hasta última hora de la tarde.
Tras su calificación por parte de la Mesa del Congreso, con el voto en contra el PP, la Ley de Amnistía se publicó en el Boletín de las Cortes y se envió al Gobierno para que diera la conformidad a su debate. La Constitución otorga al Ejecutivo la potestad de vetar la tramitación de iniciativas legislativas que condicionen su política presupuestaria, sea por aumento de gasto o por merma de ingresos.
El Gobierno dispone de 30 días para pronunciarse, pero en esta ocasión le sobraron 27 para comunicar al Congreso su "conformidad" con esta tramitación. En los últimos tiempos sólo ha habido un caso en el que respondiera todavía más rápido: con la proposición de ley que acabó con el delito de sedición, cuando tardó menos de 24 horas en dar su visto bueno al debate.