El PSOE, incómodo con el discurso del Rey, elude defenderle de los duros ataques de sus siete socios
Rompiendo la costumbre de comentar el discurso desde un atril en Ferraz, la presidenta Cristina Narbona grabó un vídeo en el jardín sin anagrama alguno.
26 diciembre, 2023 02:16El discurso de Navidad de Felipe VI ha sacudido el tablero político. Su defensa férrea de la Constitución, de la unidad de España y de la independencia de los poderes del Estado, como una prioridad en este momento frente a otros problemas del país, ha incomodado en Moncloa.
La reacción del PSOE ha sido premeditadamente tardía, escueta y fría. Consistió en una declaración enlatada de la presidenta del partido, Cristina Narbona, en la que, como dijo Pedro Sánchez en relación con la amnistía, hizo "de la necesidad, virtud", queriendo ver en las palabras del Rey un respaldo a la acción del Gobierno.
En realidad, a los socialistas les han molestado dos cosas del mensaje navideño del monarca, tal y como indican fuentes del partido a EL ESPAÑOL. Primero, el contenido eminentemente político, que da carácter de emergencia a la situación en la que se encuentra hoy el país por los ataques a la Constitución y a la unidad nacional, y por la crisis institucional. Y, en segundo lugar, el hecho de que el monarca no midiera la reacción que esas palabras iban a tener.
La idea en Moncloa ha sido, desde el primer momento, pasar página cuanto antes. Ningún miembro de la parte socialista del Gobierno ha valorado las palabras del Rey. Y hubo que esperar 16 horas para que se publicase el vídeo de Narbona, de menos de 3 minutos y grabado en un jardín, no en Ferraz, sin atril y sin ningún logo ni anagrama del partido, contrariamente a lo que había sido la tónica de los tres últimos años.
La respuesta de los socialistas llama la atención por su tibieza, particularmente porque a la hora en que emitió su vídeo, el chaparrón de críticas al Rey de sus siete aliados había sido unánime, y sólo desde las filas del PP y de Vox se había roto una lanza en su favor.
[Malestar en Zarzuela porque ningún ministro acompañara al Rey a la toma de posesión de Milei]
Las críticas contra el Rey, algunas subidas de tono, se producen justo una semana después de que el Congreso aprobase debatir una reforma del Código Penal para despenalizar las injurias a la Corona. Y también, dos semanas después de la polémica por que Moncloa dejara sólo al monarca, sin acompañamiento de un ministro, en un viaje oficial. Ocurrió con la toma de posesión de Javier Milei en Buenos Aires.
1. Sumar: "Alejado del país"
Sumar, socio de Gobierno de Sánchez, calificó de "decepcionante" y "anclado en el pasado" el mensaje de Felipe VI.
La portavoz de Yolanda Díaz en el Congreso, Marta Lois, aseguró que el monarca "ha elegido no hablar de derechos sociales y las preocupaciones de la ciudadanía para exponer la interpretación más restrictiva de la Constitución".
Lois lamentó que el discurso no aludiese a "lo que se vive con la extrema derecha", en alusión a la "amenaza a la democracia" que representa. "Un discurso alejado del país real", concluyó.
2. Podemos: "Felipe VI, el último"
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, dijo que el Rey hizo "intentos desesperados de lograr la simpatía de la derecha que hace unas semanas le insultaba". Y añadió que está "cada vez más convencida de que la Monarquía se ha quedado definitivamente atrás y de que Felipe VI va a ser el último".
En esa idea insistió María Teresa Pérez, portavoz de Podemos: "Cada vez más gente quiere que Felipe VI sea el último y que Leonor no llegue nunca a reinar". Y aseguró que el pueblo español "es un pueblo digno que no quiere ser súbdito de ningún rey".
Pérez lamentó también que el discurso de Navidad tuviera de carácter "político", al tiempo que calificó al monarca de "hipócrita" por intentar "dar lecciones de democracia".
3. ERC: "Nacionalista español"
ERC, a través de su portavoz, Gabriel Rufián, reaccionó al discurso publicando una foto del Rey de niño saludando al dictador Francisco Franco.
Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, calificó por su parte el discurso de "nacionalista español". "La ciudadanía de Cataluña no se siente representada por la monarquía", añadió.
Según Aragonès, "la mejor muestra" del valor que para él tiene lo dicho por Felipe VI "es que la derecha y la extrema derecha lo aplauden".
4. Junts: "Unidad con porras"
Jordi Turull, secretario general de Junts, subrayó que el Rey "no tiene legitimidad moral para hablar de no fomentar el germen de la discordia" y le responsabilizó de agitar el odio en Cataluña con su discurso del 3 de octubre de 2017.
"Habla de unidad, pero es una unidad a golpe de porras y togas, y eso nunca puede funcionar", manifestó.
Para Junts, el mensaje de Felipe VI fue "irrelevante" y contradictorio". De hecho, para Turull "la propia Corona española también es absolutamente irrelevante".
5. Bildu: "Boicot en radios y TV"
Desde EH Bildu, por su parte, nadie emitió valoración alguna sobre las palabras de Felipe VI. Era una estrategia calculada.
El sábado, en la víspera de Nochebuena, la formación ya anunció en un comunicado que no hablarían del mensaje "en coherencia" con sus "postulados" y "en congruencia con nuestra actuación política".
Su desprecio a las palabras del Rey lo enfocaron con una invitación a los ciudadanos a vascos y navarros a "realizar un boicot activo al discurso del monarca y jefe de las Fuerzas Armadas" para "no escucharlo" en la radio ni en la televisión.
6. PNV: "Pensado para PP, PSOE y Vox"
El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, lamentó que el Rey obviase las "discrepancias constitucionales" que existen en el País Vasco y Cataluña, y que hubiera centrado su discurso en defender "España como única nación".
Fue un discurso, según dijo, que se había hecho pensando en el "PP, PSOE e incluso Vox", y no en los nacionalistas vascos y catalanes, a los que "no hizo ningún guiño".
Para Aitor Esteban el Rey no tuvo en cuenta que "no hay una única nación en el Estado español".
7. BNG: "Alineado con los reaccionarios"
Néstor Rego, diputado del BNG en el Congreso, consideró que "el discurso de Felipe de Borbón es una toma de posición con los sectores más reaccionarios e inmovilistas del Estado".
"Felipe de Borbón no intenta siquiera empatizar con los problemas de la mayor parte de la sociedad y sí conscientemente tomar posición política por el discurso que actualmente está realizando la derecha y la ultraderecha", escribió en su perfil de X (antes Twitter).
Rego dijo también que el mensaje del monarca es "anacrónico, caduco y fuera de los tiempos actuales" y que, con sus palabras, "rompe su imparcialidad política".