La encrucijada en la que ERC siempre pierde: debe elegir entre Puigdemont, Illa o nuevas elecciones
A pesar del descalabro, la gobernabilidad pasa por los republicanos. Sin embargo, todos los escenarios posibles son malos para Pere Aragonès.
13 mayo, 2024 03:13Las elecciones de este domingo en Cataluña han dibujado una clara victoria del PSC, pero han dejado la gobernabilidad en manos de Pere Aragonès. Ahora, ERC está en una encrucijada: tiene que elegir si inviste a Salvador Illa, deja vía libre a Carles Puigdemont o lleva a los catalanes a una repetición electoral.
Sin embargo, ninguno de los escenarios es positivo para ERC. En cualquiera de ellos, pierde. Y lo hace tras el descalabro de pasar a ser la tercera fuerza, dejarse tres escaños por el camino y más de 183.000 votos.
El PSC, ERC y los comunes suman actualmente 68 escaños, la mayoría absoluta suficiente que podría proclamar a Illa president. Si bien los socialistas pueden contar casi seguro con el apoyo de los comunes, la gran dificultad radica en saber qué acabará haciendo ERC.
[Illa gana con claridad pero sólo tendría mayoría para ser investido si le apoyan ERC y los Comunes]
En su comparecencia tras conocer los resultados, Aragonès descartó tajantemente la idea de participar en un gobierno tripartito de izquierdas. También despejó la incógnita de si continuará o no, asegurando que trabajará desde la oposición. Sin embargo, no dijo si apoyaría una investidura de Illa desde fuera del Gobierno.
Con el gesto serio, Aragonès aseguró la noche de este domingo que "la oposición al Gobierno republicano, la oposición de PSC y Junts, ha ganado". "Corresponderá a PSC y Junts gestionar la nueva etapa. Asumiremos la voluntad de la ciudadanía", añadió.
De sus palabras se extrae que está dispuesto a hablar con ambas formaciones. En caso de que apoye a Illa, el socialista podría tener un gobierno en solitario e ir pactando con las distintas fuerzas para sacar adelante los proyectos. El gran problema es el precio que tendría que pagar Illa para obtener el sí de los republicanos y si está dispuesto a hacerlo.
A lo largo de la campaña, Aragonès ha subrayado que podría apoyar a Illa bajo tres condiciones. La primera, consistiría en sentar las "bases para un referéndum de independencia" pactado con el Estado. De partida, esto es algo que ni Illa ni Pedro Sánchez estarían dispuestos a asumir.
[Aragonès dice que ERC trabajará "desde la oposición" y deja en duda un tripartito de izquierdas]
El president saliente también propone una "financiación singular" para Cataluña. Si bien esto es algo que ERC ha venido reclamando hace años, todavía no se ha concretado en nada y no es fácil saber hasta dónde estaría dispuesto a llegar el Gobierno de Sánchez en este punto.
La tercera condición, la más fácil para Illa, consiste en impulsar la lengua catalana.
En esta tesitura, ERC tiene que tener un especial cuidado a la hora de acercarse al PSC. Aragonès reconoció este domingo que la "apuesta por la negociación de la resolución del conflicto no ha sido lo suficientemente valorada por la ciudadanía". Es decir, que interpreta que acercarse a Sánchez en el Congreso no le ha venido bien. Acercarse ahora a Illa podría apuntalar su hundimiento.
Junts o repetición electoral
La otra opción que tiene ERC es apoyar a Junts. El líder de los posconvergentes, Carles Puigdemont, aseguró este domingo que descartaba una repetición electoral en Cataluña y que estaba "en condiciones de construir un gobierno sólido de obediencia netamente catalana".
"A ese propósito dedicaremos las próximas horas y días con el objetivo de que haya un gobierno coherente con un buen liderazgo en el Parlament y evitar la repetición electoral", aseguró.
Con sus declaraciones, el expresidente catalán parece indicar que está en disposición de intentar gobernar él. Sin embargo, los independentistas no suman lo suficiente por sí mismos y, para ello, sería necesario el apoyo de Salvador Illa. La única forma de que esto pueda suceder es que Junts exija al PSOE la abstención del PSC en Cataluña a cambio de no hacer caer la legislatura dejando de apoyar a Sánchez.
[Puigdemont pide el apoyo de ERC para forzar que Illa le deje gobernar aunque no sumen mayoría]
Este no es un camino claro porque, para ser presidente, Puigdemont necesita la Ley de Amnistía que todavía no se ha aprobado y que el PSOE aún podría tumbar.
Además, sería muy doloroso para ERC apoyar a sus principales competidores en el ámbito independentista, que además ya rompieron la coalición que acordaron tras las autonómicas de 2021, dejando a Aragonès solo en el Ejecutivo.
Si Aragonès no termina de decantarse por Illa o Puigdemont, la única opción es la de la repetición electoral. Pero este también es un mal escenario para los republicanos, ya que tradicionalmente la ciudadanía castiga al partido que obliga a repetir los comicios cuando hay una posibilidad real de gobernar.
Fuentes socialistas aseguran que el escenario de la repetición está prácticamente descartado porque, para los comicios de este domingo, la gente tenía el voto muy pensado y una repetición podría no alterar sustancialmente los resultados.