El presidente asturiano, Adrián Barbón, visita la exposición 'Goya, ni más ni menos' en el Centro Niemeyer de Avilés, este lunes.

El presidente asturiano, Adrián Barbón, visita la exposición 'Goya, ni más ni menos' en el Centro Niemeyer de Avilés, este lunes. Efe

Política ACUERDO PSOE-ERC

Conato de rebelión contra Barbón en el PSOE de Asturias por su 'deslealtad' a Sánchez con el concierto

Los críticos presentan este viernes una moción para hacer caer al líder por su "deslealtad" con Sánchez al aliarse con Page contra el pacto con ERC.

16 agosto, 2024 02:05

Que Adrián Barbón es un sanchista de origen se sabe en toda España. Que firmó la llamada Declaración de Santiago impulsada por Alberto Núñez Feijóo, se recuerda menos. Pero que ambas cosas ha llegado el momento de que sean incompatibles es una realidad: no se puede estar con el cupo catalán y con el régimen común de las Comunidades Autónomas.

La rebelión de Barbón contra la "financiación singular" de Cataluña es la espita que ha utilizado un grupo de críticos en la Federación Socialista Asturiana (FSA) para tratar de derrocarlo. Este grupo, que dice estar comandado por varios alcaldes y decenas de ediles, se presentará este viernes, en una concentración frente a la sede de Gobierno en Oviedo.

Y lo más llamativo: aseguran tener pruebas de la connivencia de la Ejecutiva Federal del PSOE.

Nota de los críticos contra Adrián Barbón en el PSOE de Asturias.

Nota de los críticos contra Adrián Barbón en el PSOE de Asturias. E.E.

Es más, en una serie de notas enviadas a la militancia socialista asturiana -a las que ha tenido acceso este diario-, advierten que presentarán los correos electrónicos cruzados con algunos de sus miembros en el último año, que "demostrarán" sus contactos con la Ejecutiva de Ferraz.

A pesar de ello, o precisamente por el "nerviosismo" que este movimiento ha causado en la secretaría de Organización de Santos Cerdán, este mismo jueves su equipo emitía una nota expresando el "contundente apoyo" a Barbón de la dirección federal del partido.

Con Page

El barón asturiano, efectivamente, fue uno de los líderes regionales socialistas que se mostraron contrarios al contenido del acuerdo entre el PSC y ERC para la investidura de Salvador Illa. Barbón incluso llegó a reclamar que, antes de que se aprobara, Pedro Sánchez diera explicaciones en el Comité de Política Federal. Pero Sánchez permaneció en silencio, y como ya informó este diario, se negó a dar oportunidad a este debate interno.

Es más, fuentes socialistas insistieron en que esta rebelión que lideró Emiliano García-Page con la declaración institucional del "hasta aquí" le venía bien a Sánchez: "Cuanto más se eleven voces en el resto de España, más fácil será que las bases de ERC apoyen el pacto".

La misma dirección interina del partido republicano, dividido y arrasado electoralmente, temía que su militancia rechazara investir al "españolista" Illa, a pesar de haber acordado "el mayor avance en financiación en 40 años de democracia".

Pero que Page levantara la voz, que Sánchez arremetiera contra él -"lo sorprendente sería que el presidente castellano-manchego dijese que está de acuerdo en algo con el Gobierno", afirmó- y que Barbón lo secundara públicamente, ha impulsado este conato de rebelión en Asturias.

Es esta coincidencia la que ha hecho sospechar que Ferraz podría estar detrás de la rebelión. Y según fuentes consultadas a nivel federal y regional, todo encajaría como un "aviso a navegantes" para advertir de que el que se mueva se queda fuera de la foto. Por muy sanchista de cuna que sea.

Hay que recordar que Barbón comanda la FSA de la mano de su compañera y amiga íntima Adriana Lastra. Recién nombrada delegada del Gobierno en el Principado, Lastra dejó su cargo de vicesecretaria general en la Ejecutiva del PSOE hace ya dos años, con un portazo y un enfrentamiento a gritos con Sánchez.

Nunca se explicó públicamente el motivo, que además coincidió con una grave situación personal -un embarazo muy dificultoso-, pero fuentes de Ferraz admiten que el presidente le reprochó sus movimientos en la sombra para, supuestamente, preparar una alternativa para liderar el partido ante una eventual derrota electoral.

Es más, el pasado abril, después de que Sánchez se tomara sus cinco días de reflexión, también se rumoreó que Lastra había iniciado "nuevas maniobras".

El entorno de la política asturiana rechaza cualquiera de estas versiones. Y además asegura que los supuestos críticos "no son más que cuatro, sin apoyos ni seriedad". Que sólo "buscan protagonismo". Y que lo único que les mueve es un intento de acabar con los pactos con IU en la región.

La derivada IU

El grupo de críticos acusa al presidente asturiano, que lidera la federación desde 2017, de "deslealtad" a Sánchez, aunque hay que recordar que su representante en la Ejecutiva, Iván Fernández, votó a favor del acuerdo con ERC en la Ejecutiva: sólo hubo una abstención, la del manchego Álvaro Martínez Chana.

Pero también arremeten contra Barbón por estar "controlado por los intereses de Izquierda Unida". La formación a la izquierda del PSOE es uno de los elementos de Sumar que, aunque forma parte de la coalición de Gobierno de Sánchez, se ha mostrado crítica con la "financiación singular" de Cataluña.

Su líder, el recién llegado Antonio Maíllo, defiende un modelo común de solidaridad entre CCAA. Y el acuerdo de investidura de Barbón, tras las autonómicas del año pasado, le hace contar con Ovidio Zapico, el líder asturiano de IU, en el Consejo de Gobierno, además de mantener pactos en decenas de concejos.

Pero fuentes socialistas advierten en esta marejada interna un síntoma de que "la quiebra del PSOE a causa del pacto con el independentismo" está empezando a provocar movimientos de ruptura. Y que, sea o no cierta la connivencia de la Ejecutiva "o de algún elemento dentro" de ella con este conato de rebelión contra Barbón, a Sánchez le beneficia este motín, como advertencia.