Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y Xi Jinping, presidente de China, en Moncloa, durante su visita de Estado a España, en noviembre de 2018.

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, y Xi Jinping, presidente de China, en Moncloa, durante su visita de Estado a España, en noviembre de 2018.

Política GOBIERNO

Albares acompañará a Sánchez en su visita de 5 días a China para afianzar una relación "privilegiada"

Fuentes diplomáticas destacan el "canal abierto" entre Madrid y Pekín, y la gran importancia de un viaje a "un actor principal".

5 septiembre, 2024 18:38

El ministro José Manuel Albares acompañará al presidente en el largo viaje oficial de Pedro Sánchez a Pekín y Shanghái. El presidente continúa su periplo internacional, tras la gira africana de la semana pasada, después de su visita a los Juegos Paralímpicos de este jueves, en París, y antes de asistir a la Asamblea General de Naciones Unidas, en Nueva York, a finales de septiembre.

Sánchez y Albares dejarán Madrid el sábado 7 y comenzarán su periplo oficial por las dos capitales chinas, la política y la económica, el domingo 8. El amplio programa se prolongará hasta bien entrado el miércoles 11 de septiembre.

Así lo ha podido confirmar este diario en fuentes oficiales. La presencia del ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación da cuenta de la importancia que el Gobierno da a esta visita. "China es un actor principal, no sólo en lo geopolítico o comercial, sino también para los esfuerzos españoles y europeos por la transición climática", apuntan fuentes diplomáticas.

Según todas las fuentes consultadas, aunque la parte china no lo ha confirmado oficialmente, se da por seguro que Sánchez será recibido con honores por el presidente Xi Jinping. Sería, así, la tercera cumbre bilateral entre ambos mandatarios en apenas seis años. La cuarta si se añade la entrevista privada que mantuvieron en los márgenes del G-20 de Bali, en noviembre de 2022.

Y esta vía privilegiada entre los dos mandatarios es algo especialmente significativo para Moncloa. Desde el inicio de la invasión de Rusia en Ucrania, las relaciones entre el gigante asiático ("amigo sin límites" de Vladímir Putin) y la Unión Europea terminaron de tensarse, llegando a un punto grave, incluso, cuando Ursula von der Leyen marcó una posición especialmente beligerante.

Era marzo de 2023, varios líderes europeos trataban de seducir a Xi, como el francés Emmanuel Macron y el alemán Olaf Scholz. Poco después de aquel punto de inflexión, Sánchez ya visitó Pekín, en marzo de 2023, para entrevistarse con Xi. 

Incluso, en Bruselas se llegó a sugerir que la invitación personal del mandatario chino a Sánchez para ser el siguiente en pasar por su palacio era "un intento de Pekín para dividir a la UE" respecto al apoyo inequívoco a Ucrania. Pese a esas advertencias, hasta el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, apoyó sin fisuras la visita del presidente español a China.

Pasado ya año y medio, la UE ha fijado una posición de "no desacoplamiento pero sí desincentivación" en lo tocante a las relaciones políticas, y de "protección" en sectores sensibles de la economía continental. 

Geoestrategia

Por eso, aunque Sánchez no es el único líder europeo que juega su propio papel geoestratégico con China, las fuentes consultadas destacan que el "canal abierto" entre Pekín y Madrid es "privilegiado", además de necesario, precisamente en una etapa en la que el país asiático ha consolidado su posición como segunda gran potencia global.

España lucha por no perder posiciones como uno de los mayores exportadores del sector europeo del automóvil. Y para eso necesita atraer inversiones, como las de la industria china, que copa todos los ciclos de producción.

El presidente del Gobierno ya estuvo en China en marzo de 2023, donde se entrevistó con Xi, a quien había recibido en visita de Estado en noviembre de 2018. Aquel viaje del mandatario chino lo culminó Sánchez a los pocos meses de llegar a la Moncloa, pero fue preparado "con mimo" por la anterior Administración popular de Mariano Rajoy

Por entonces, España buscaba su parte en la tarta de la llamada nueva ruta de la seda (Belt and Road Iniciative), el programa multimillonario de inversiones globales lanzado por Xi, y que está consolidando la expansión global de un país que tradicionalmente miraba hacia dentro. 

José Manuel Albares, junto al ministro de Exteriores chino, Wang Yi, en la cumbre del G-20 en Bali, de julio de 2022.

José Manuel Albares, junto al ministro de Exteriores chino, Wang Yi, en la cumbre del G-20 en Bali, de julio de 2022. TW

Hoy, todo aquello ha quedado olvidado, pero se han abierto otras vías para los intercambios entre ambos países. "Ni sería inteligente para España ni sería bueno para Europa dar la espalda a China", concluyen las fuentes.

Y como aquel viaje de Xi a España, éste lleva meses de trabajo en Exteriores y Moncloa, como demuestra el hecho de que al presidente lo acompañe el titular de Exteriores. Albares prevé tener contactos con su homólogo, Wang Yi, hombre fuerte de Xi que ocupó el cargo durante su primera década en el poder, y que retomó el cargo hace ahora poco más de un año, en sustitución del joven que lo había sucedido, Qin Gang.

Sánchez y Albares comenzarán la ruta en Pekín, y después volarán a Shanghái, para inaugurar el IX Foro España-China. El evento, organizado por la Asociación para la Amistad del Pueblo Chino con el Extranjero y la Fundación Consejo España China, se relanza este año tras su última celebración en 2015. Y busca tender puentes entre los actores empresariales, culturales y sociales de ambos países.