Sánchez anuncia 400 M en el G20 para los países más pobres: "Predicamos con el ejemplo en la lucha contra el hambre"
- El presidente lleva la DANA en Valencia a la cumbre de Río de Janeiro con el mismo mensaje que trasladó en la COP29 de Bakú: "El cambio climático mata".
- Más información: El Gobierno presume de reducir la pobreza a la mitad, pero uno de cada cinco españoles sigue siendo pobre
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido la creación de un impuesto global al patrimonio, tal como propone el presidente de Brasil, Lula da Silva y además ha anunciado que entregará 400 millones de euros a la Asociación Internacional de Fomento (AIF) para financiar proyectos de desarrollo en los países más pobres.
Sánchez hizo este anuncio ante el resto de líderes del G20 en su intervención en la primera sesión de la cumbre de este grupo de países que se celebra en Río de Janeiro, dedicada a abordar el problema del hambre y la pobreza en el mundo.
Las intervenciones de los líderes, a excepción del anfitrión, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, fueron a puerta cerrada, pero fuentes del Gobierno español informaron del anuncio de Sánchez.
En concreto, avanzó que España "está dispuesta a predicar con el ejemplo" en la lucha contra el hambre y la pobreza y comprometerá 400 millones de euros en la próxima reposición de la Asociación Internacional de Fomento, que es la entidad del Banco Mundial que ayuda a los países más pobres. Esa contribución explicó que supone un incremento de casi el 40 % respecto a la anterior reposición.
Ante el plenario de la cumbre, en el que estuvo presente la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, como las parejas de otros líderes tras la invitación expresa realizada por Lula, Sánchez reiteró el apoyo de España a la Alianza contra el Hambre y la Pobreza que vio la luz oficialmente al inicio de la reunión y que se trata de una iniciativa impulsada por el presidente brasileño.
Una alianza a la que España fue uno de los primeros países en adherirse y que pretende la erradicación del hambre y la pobreza para 2030 mediante el impulso político al más alto nivel mediante la movilización de la financiación y promocionando la cooperación horizontal entre países.
Para Sánchez, hay cifras "inaceptables" y totalmente evitables, como que alrededor de 733 millones de personas pasaban hambre en 2023, mientras que aproximadamente 712 millones de personas vivían en la pobreza extrema en 2022, 23 millones más que en 2019.
Por eso consideró que no hay causa más importante ni urgente por la que luchar que erradicar el hambre, disminuir drásticamente la pobreza y reducir desigualdades.
El presidente del Gobierno aseguró que España ya está cumpliendo con sus objetivos que se ha puesto en el país, como subir el salario mínimo más de un 50% desde 2018, crear un Ingreso Mínimo Vital que ya está protegiendo a dos millones de ciudadanos y reducir la desigualdad a lo que ha calificado de mínimos históricos.
Sánchez lleva la DANA al G-20
El presidente del Gobierno llevó este lunes a la cumbre del G20 las consecuencias de la reciente DANA que afectó a la Comunidad Valenciana para intentar concienciar de la necesidad de actuar ante un cambio climático que ha vuelto a advertir de que "mata".
Sánchez se refirió a los efectos de esa DANA en su intervención ante el resto de líderes del G20 presentes en esta cumbre, todos menos el presidente ruso, Vladímir Putin.
Fuentes del Gobierno informaron de que en esa intervención el jefe del Ejecutivo recalcó que es imperativo que se redoblen esfuerzos en la lucha contra el cambio climático.
"El cambio climático mata", dijo textualmente, según estas fuentes, repitiendo el mensaje que trasladó también días atrás a la cumbre del clima que se celebra en Bakú, la capital de Azerbaiyán.
Como ejemplo de que el cambio climático cuesta vidas humanas citó lo que ha sucedido recientemente con esa dana que ha provocado hasta ahora 227 fallecidos en tres comunidades autónomas, la mayoría de ellos en la provincia de Valencia.
Sánchez reclamó que ante este tipo de consecuencias del cambio climático, los países del G20 den el impulso necesario para garantizar una negociación exitosa en la COP29 de Bakú.
Un impulso, explicó, que acelere la aplicación del Acuerdo de París y garantice una financiación suficiente procedente de una amplia gama de fuentes y contribuyentes.