Turquía consulta con España, Italia, Francia y la UE una respuesta conjunta para la "estabilidad" en Siria
- Hakan Fidan, ministro de Exteriores turco, telefonea a Albares, Tajani, Barrot y Kallas para explorar la colaboración europea en Oriente Próximo.
- Más información: Albares aborda la intervención rusa en Siria y los planes para Ucrania en una bilateral con Turquía en la sede de la OTAN.
La crisis en Siria que ha supuesto el derrocamiento del régimen de Bachar Asad en apenas dos semanas, puede tener graves consecuencias en toda le región de Oriente Próximo y, por ende, en a geopolítica global. Turquía, potencia regional fronteriza y con trascendentales intereses en el país, ha iniciado movimientos diplomáticos de urgencia este domingo con una ronda de llamadas de su ministro de Asuntos Exteriores, Hakan Fidan, sus contrapartes en la Unión Europea, España, Italia y Francia.
Se da la circunstancia de que uno de los primeros titulares de Exteriores contactado, el español José Manuel Albares, ya mantuvo una reunión bilateral muy recientemente con Fidan, en los márgenes de la última reunión ministerial de la OTAN, en Bruselas, esta semana. Entonces, ambos ya abordaron la crisis del régimen sirio, que este domingo parece haber llegado al final, tras 61 años de dominio de la familia Asad.
Públicamente, el Gobierno español se ha limitado a abogar por "la integridad territorial" de Siria. Pero, a pesar del críptico silencio que mantiene el Ministerio de Asuntos Exteriores respecto de este inesperado y súbito giro de una guerra civil en Siria que dura ya casi década y media, fuentes diplomáticas señalan el papel clave que estaría jugando España en el actual panorama de Oriente Próximo.
No en vano, Albares llegó a esa reunión de la Alianza Atlántica como portador de una advertencia iraní. En la segunda de sus reuniones en apenas dos meses con el jefe de la diplomacia española, el ministro de Exteriores de la República Islaḿmica, Abbas Araghchi, pidió a Madrid que transmitiera al resto de aliados occidentales que Teherán ya había activado "miles de centrifugadoras avanzadas" de su programa nuclear.
En esta nueva conversación con Albares, después de su bilateral del pasado miércoles, el jefe de la diplomacia turca intercambió impresiones telefónicamente con su homólogo español sobre la necesidad de realizar esfuerzos para establecer la paz en la región.
Según fuentes del Ministerio turco citadas por la Agencia Anadolu, Albares y Fidan trataron también sobre la necesidad de facilitar la estabilidad en Siria y los pasos que la comunidad internacional podría tomar a este respecto.
Turquía, gozne geopolítico
La llamada a Albares se enmarcó en una ronda de contactos impulsados por el propio ministro turco este domingo sobre el colapso del régimen sirio, impulsado por una ofensiva de rebeldes islamistas que ha acabado con la huida de Asad a Moscú. La Rusia de Vladímir Putin había sido el principal valedor de dictador 'baazista', junto al apoyo militar y económico de Irán en los últimos años.
Turquía es el único miembro de la OTAN de mayoría musulmana y mantiene un estatus extraño de eterno candidato a entrar en la UE, desde hace 25 años.
Los gobiernos de Recep Tayyip Erdogan llevan años jugando un rol de gozne entre los dos bloques geopolíticos que se han ido decantando en la última década, desde la intervención rusa en la guerra siria, en septiembre de 2015, que apuntaló a Asad, hasta el intento de invasión de Ucrania, en febrero de 2022, por parte de Putin.
Turquía nunca ha condenado a Moscú ni ha facilitado las decisiones de la OTAN en este conflicto, y sí ha jugado su propio papel mediador para lograr acuerdos que paliaron la crisis alimentaria los primeros meses de guerra, garantizando con su flota de guerra la reapertura del puerto de Odesa. Mientras, ha seguido importando gas de Rusia para abastecer sus necesidades energéticas.
Por otro lado, gran parte de su región fronteriza con Siria está sembrada del llamado 'problema kurdo', un pueblo sin Estado cuyos integrantes están diseminados entre Turquía, Siria, Irak e Irán principalmente. España cuenta con una comunidad no desdeñable de la diáspora kurda dentro de sus fronteras.
La represión a los partidos kurdos y a iniciativas independentistas en la región fronteriza entre Turquía y Siria fue uno de los motivos por los que Ankara también intervino en la guerra del país vecino y por los que ahora trata de tomar posiciones diplomáticas. Mientras, en otra de las fronteras del país, Israel tambień ha ordenado a su ejército a la toma posiciones preventivas.
Con todas las diferencias sociológicas y distancias geográficas, España y Turquía tienen una relación similar con Jerusalén, de enfrentamiento político e intereses compartidos, en la región.
Kallas, Tajani y Barrot
Además de con Albares, Fidan ha contactado este domingo, dentro de su ronda de llamadas, con la recién estrenada Alta Representante de la Unión Europea, la ex primera ministra de Estonia, Kaja Kallas.
Según las citadas fuentes diplomáticas, el ministro turco y la jefa de la diplomacia europea hablaron por teléfono sobre el posible futuro de Siria.
Minutos después, Fidan contactó con el viceprimer ministro y titular de Exteriores italiano, Antonio Tajani. Ambos enfatizaron la importancia de garantizar "la integridad territorial y la unidad política de Siria". También se hizo hincapié en la necesidad de proteger a las minorías religiosas durante la transición de Siria.
Más tarde, Tajani confirmó esta llamada a la prensa: "Estamos de acuerdo en la importancia de mantener la unidad de Siria. Reiteré mi petición de que Turquía haga todo lo posible para garantizar la seguridad de los ciudadanos italianos y la protección de los cristianos y otras minorías".
Tajani también señaló que Ankara está dispuesta a cooperar diplomáticamente con Roma para garantizar la estabilidad en Oriente Próximo.
Fidan también habló por teléfono con el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, sobre la situación en Siria. Ambos ministros abordaron también la derivada regional del Líbano, donde se mantiene un frágil alto el fuego entre Israel y la milicia terrorista de Hezbolá, financiada y armada por Irán y el ahora depuesto régimen sirio de Asad.
En la llamada se hizo hincapié en la necesidad de una transición ordenada en Siria, instando a la comunidad internacional a ayudar al pueblo sirio a evitar la llegada al poder de organizaciones terroristas.