El portavoz de Sumar y Ministro de Cultura, Ernest Urtasun, este lunes en la sede del partido en Madrid. Europa Press
La 'agenda familiar' de Urtasun: el ministro de Cultura se fue al circo en vez de representar a España en Notre Dame
- El ministerio acusa a Exteriores de no gestionar correctamente el viaje y de no reclamar a Francia un cambio en las invitaciones.
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De todas las grandes ausencias entre jefes del Estado, de Gobierno y personalidades europeas a la reapertura de la catedral de Notre Dame, la que más revuelo ha causado ha sido la de Ernest Urtasun. Principalmente, porque el hecho de que el líder de Sumar declinara su invitación (que era personal y no delegable) provocó, a su vez, que los Reyes tampoco pudieran asistir. Así con todo, ningún representante español acudió al evento.
El ministro de Cultura justificó su plantón aludiendo a que tenía un "compromiso familiar", sin dar más explicaciones. Lo curioso del asunto es que la recepción en la catedral parisina ocurrió casi al mismo tiempo en que el ministro asistía en Madrid a Circlassica, la función del Circo Mundial, en el recinto ferial de Ifema. Apenas les separaron 15 minutos.
Dicho de otro modo, Urtasun declinó la invitación a Notre Dame (y, en consecuencia, evitó cualquier representación de España en el evento) para asistir a una función de acrobacias, payasos y malabares que lleva en escena desde el 31 de octubre y que seguirá ahí hasta el 12 de enero. Más aún, que razonó el esquinazo con que tenía un "compromiso familiar" del que no ha dado ninguna explicación.
Preguntado por el asunto este lunes durante la rueda de prensa de Sumar, alegó que "hoy no toca hablar de eso".
El ministro asegura que, al comparecer en calidad de portavoz de Sumar y no como representante del Gobierno, no podía responder preguntas relativas a su gestión. Sin embargo, sí respondió preguntas sobre los Presupuestos Generales del Estado o la petición de Junts para que Pedro Sánchez se someta a una cuestión de confianza.
Fuentes del Ministerio de Cultura justifican la ausencia de Urtasun con el citado compromiso del que no podía excusarse y ponen el acento en que ellos no son quienes deciden la política exterior de España. De hecho, creen que "hubiera estado bien" que el Ejecutivo buscara una fórmula para que algún dirigente gubernamental o de la Casa Real pudiera viajar a París.
Las mismas fuentes sugieren que, "el día de antes" al evento, el Gobierno francés se abrió a que "algún otro" miembro del Consejo de Ministros asistiera en lugar de Urtasun, que en principio era el único invitado. Atribuyen las culpas al Ministerio de Exteriores, que es "a quien le toca coordinar" estas cosas, y añaden que los Reyes podrían haber ido acompañados del embajador en París.
El departamento dirigido por José Manuel Albares niega haber tenido nada que ver y asegura que nunca llegó a recibir "ninguna consulta ni petición" de Cultura. "Pero si no iban ellos [Urtasun y/o los Reyes] no podía ir nadie más, porque las invitaciones son intransferibles", aseguran.
La ausencia de Urtasun y el Gobierno ha suscitado las críticas de la oposición. El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, la calificó cómo "una vergüenza para nuestro país", especialmente porque el acto del sábado se celebró con la asistencia de decenas de dirigentes internacionales, como el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
Además de 150 obispos de todo el mundo, asistieron entre otros la primera dama estadounidense, Jill Biden, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni o el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que fue recibido previamente en el Elíseo junto a Trump por el presidente francés, Emmanuel Macron.
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