Archivado el caso contra el jefe de Policía que frenó una fiesta ilegal en Madrid en plena Covid
En el caso conocido como 'la patada en la puerta de la calle Velázquez', los agentes accedieron a una vivienda para detener una fiesta prohibida.
27 julio, 2023 13:03La patada en la puerta de la calle Velázquez, archivada. El Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid ha dictado el sobreseimiento libre para el subinspector de Policía investigado por acceder en 2021, junto a sus subordinados, a una vivienda de Madrid, ubicada en dicha calle, para frenar una fiesta ilegal durante la pandemia.
Así consta en un auto, fechado el pasado 21 de julio y al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. Tal y como adelantó este periódico, ésta era la consecuencia previsible, ya que el querellante —el inquilino del piso— retiró su acusación y la Fiscalía pidió hace menos de una semana el archivo de la causa.
Como investigado únicamente figuraba ya el jefe del grupo policial, pues el juez instructor también exoneró a los cinco agentes subordinados a éste y sólo procesó al subinspector. Estaba previsto que fuese juzgado por un jurado popular. Pero el Ministerio Público solicitó recientemente el archivo del caso para él, ya que considera que cometió un "error invencible", lo que anula la posible responsabilidad penal. Es decir, actuó pensando que obraba de forma legal.
Este caso se inició con la querella interpuesta por el inquilino de la vivienda, de nacionalidad libanesa, contra los seis agentes, por un supuesto delito de allanamiento de morada.
La patrulla utilizó el método conocido como resbalón, consistente en insertar una lámina dura entre la puerta y el marco para abrirla. Tres de estos policías, incluido el jefe del grupo, participaron también en la patada en la puerta de la calle Lagasca, un caso similar a éste, ocurrido un día antes, en el que, utilizando un ariete, penetraron en una vivienda en la que se celebraba una fiesta no permitida por las restricciones sanitarias.
En esta ocasión, la operación se produjo la noche del 22 de marzo de 2021 en una vivienda de la madrileña calle Velázquez. La fiesta que allí estaba teniendo lugar estaba prohibida por las limitaciones contra la Covid-19.
Según señaló la Fiscalía en su escrito, otro de los jóvenes que participaba en ella, también extranjero, mordió a uno de los policías en la mano, aunque no le provocó ninguna herida. Aquello derivó en otro procedimiento judicial y el joven acabó aceptando una condena por un delito de atentado.
Sobre el caso Velázquez, la Fiscalía advirtió en su escrito que, cuando fue interrogado, el inquilino del piso "incurrió en contradicciones evidentes y de relevancia". Aquella versión fue desmentida por las imágenes que grabó la cámara corporal, que forma parte del uniforme policial, del subinspector del grupo.
"Se puede apreciar cómo los agentes golpean fuertemente la puerta de la vivienda, identificándose como policías y requiriendo a las personas que se encuentran en su interior para que salgan a identificarse", indicó la fiscal del caso.
La Fiscalía admitió que "puede ser discutible" que la negativa a identificarse suponga, en un caso como éste, un delito de desobediencia grave, como sí sostenían los policías. "No obstante, lo cierto es que el investigado actuaba en plena creencia de que su actuación era lícita y legal", subrayó la Fiscalía, tras recordar las discrepancias que los distintos órganos judiciales han mantenido en este procedimiento.