Juan Lobato muestra en la Asamblea de Madrid el correo electrónico que el defensor de González Amador envió al fiscal de delitos económicos admitiendo la comisión de dos delitos tributarios.

Juan Lobato muestra en la Asamblea de Madrid el correo electrónico que el defensor de González Amador envió al fiscal de delitos económicos admitiendo la comisión de dos delitos tributarios. E. E.

Tribunales

Los whatsapps que Lobato dará al juez determinarán si Moncloa participó en la filtración delictiva para dañar a Ayuso

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La investigación de la filtración de los correos auto-incriminatorios del novio de la presidenta madrileña Díaz Ayuso, que comenzó en el Tribunal Superior de Madrid contra un fiscal de a pie y la fiscal jefa de Madrid, afecta ahora al fiscal general del Estado, a quien el Tribunal Supremo abrió un proceso el pasado 16 de octubre, y empieza a escalar hacia la Moncloa.

La revelación del secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, de que desde del gabinete del presidente del Gobierno le pidieron utilizar contra Isabel Díaz Ayuso el correo electrónico en el que el defensor del empresario Alberto González Amador reconoce que éste cometió un fraude tributario ha abierto a Pedro Sánchez un nuevo frente judicial de evolución imprevisible.

Lo que sí es previsible es que el magistrado instructor del Supremo, Ángel Hurtado, "no va a mirar para otro lado", aseguran fuentes del alto tribunal.

uan Lobato muestra en la Asamblea de Madrid el correo electrónico que el defensor de González Amador envió al fiscal de delitos económicos admitiendo la comisión de dos delitos tributarios.

Hurtado, cuya primera diligencia de investigación fue ordenar un registro en el propio despacho del fiscal general para incautar todos sus dispositivos electrónicos, ha acordado de inmediato, sin esperar a que nadie se lo pida, llamar a declarar a Lobato como testigo.

El próximo viernes el dirigente socialista madrileño "deberá acudir aportando copia del acta de manifestaciones notariales que, al parecer, realizó en relación con los hechos", precisa la resolución judicial.

El instructor quiere conocer el contenido de los 'whatsapps' que Lobato protocolizó ante notario para asegurarse  "de que no se pierdan", según manifestó ayer el político socialista madrileño.

Esos mensajes, datados el 14 de marzo pasado, reflejan una conversación entre Lobato y Pilar Sánchez Acera, que entonces era la jefa de gabinete de Óscar López, en aquel momento director del gabinete del presidente Sánchez y hoy ministro de Transformación Digital.

Moncloa pretendía que ese día, durante el pleno de la Asamblea de Madrid, Lobato utilizara contra la presidenta regional el correo en el que Carlos Neira, abogado del novio de Ayuso, admite que su cliente "ciertamente" cometió dos delitos fiscales. El letrado había enviado ese correo al fiscal de delitos económicos Julián Salto, planteándole la posibilidad de un acuerdo de conformidad que librara a la pareja de Díaz Ayuso de la cárcel.

La filtración del correo del abogado Neira al fiscal Salto es lo que investigan los jueces por tratarse de un presunto delito de revelación de secretos que, cuando perjudica a un particular y lo comete un funcionario o autoridad, puede llegar a estar penado con hasta cuatro años de cárcel.

El procedimiento parecía acotado en la Fiscalía. Pero la irrupción de Lobato en el escenario judicial presenta riesgos de que el foco de la filtración (o filtraciones) se amplíe.

La filtración

Según adelantó ayer Abc, Sánchez Acera envió a Lobato "una fotografía de la confesión remitida por el abogado de González Amador al fiscal del caso" para que la utilizara en la Asamblea. Lobato se habría negado y entonces Acera le habría dicho que se lo pasaría a Angélica Rubio, entonces directora de Elplural y ahora designada por el PSOE miembro del Consejo de Administración de RTVE.

Efectivamente, a las 09:06 horas del 14 de marzo Elplural publicó una noticia cuyo titular era “Ésta es la carta del abogado del novio de Ayuso pidiendo un acuerdo a la Fiscalía”. Fue el primer medio que reprodujo la imagen del correo electrónico de Neira al fiscal Salto.

De esta forma, cuando Lobato interpeló a Ayuso en la Asamblea de Madrid sobre las 10:10 horas de esa mañana, pudo afear a la presidenta madrileña el comportamiento de su pareja basándose en lo publicado en los medios de comunicación. Llamativamente, el dirigente socialista madrileño no exhibió una copia de Elplural, sino el propio correo inculpatorio para González Amador.

Fuentes judiciales señalaron que será preciso indagar si la jefa de gabinete de Óscar López envió a Lobato el documento del correo electrónico y si lo hizo antes o después de su publicación en Elplural. Son dos datos claves para determinar su eventual implicación en el caso como investigada.

Informe de la UCO

Según las mismas fuentes, esta derivada política de la filtración "no aparta el foco del fiscal general". Para empezar porque, de confirmarse que un correo de un abogado dirigido a un fiscal estaba en el gabinete del presidente del Gobierno, habrá que aclarar cómo llegó allí.

En segundo lugar, porque el informe que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha elaborado sobre los datos de los dispositivos electrónicos de la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez, plantea una ampliación de la investigación, hasta ahora centrada en los correos electrónicos de Neira a Salto.

La UCO sostiene en ese informe que la denuncia que la Fiscalía interpuso contra González Amador el 5 de marzo, atribuyéndole dos delitos tributarios y otro de falsedad documental, "será filtrada a la prensa por parte de la Fiscalía General del Estado". Se refiere a la aparición de esa denuncia en eldiario el 12 de marzo, junto a otros datos del expediente abierto al novio de Ayuso por la Agencia Tributaria. 

El informe policial reproduce varios 'whatsapps' obtenidos del teléfono de Pilar Rodríguez.

En uno de ellos, fechado el 13 de marzo, la fiscal jefa de Madrid escribió a otra fiscal "el jueves [7 de marzo] Diego me pidió las diligencias [de investigación abiertas por la Fiscalía a González Amador] y le mandé toooodo. Así que me imagino que después de analizarlas es cuando se ha dado publicidad por FGE".

En otro correo de ese mismo día, Diego Villafañe, teniente fiscal de la Secretaría Técnica, comenta a Rodríguez que "es curioso que Almudena [Lastra, fiscal superior de Madrid] esté cabreada...Con otras filtraciones no se ofende". Pilar Rodríguez le contestó que "Almudena estaba enfadada porque se ha filtrado solo a un medio, según me dijo".