El éxito de Málaga no es "por el azar o porque lo hayan regalado", sino "fruto de un programa muy claro que tuvo la ciudad en colaboración con otras administraciones y se ha ido desarrollando", ha afirmado Francisco Salado en respuesta a la "crisis inventada" sobre si se había beneficiado al aeropuerto de la Costa del Sol desde la Junta de Andalucía para lograr retomar la conexión directa con Nueva York.
Así lo ha defendido el presidente de la Diputación de Málaga en la clausura institucional del foro Málaga en la vanguardia del talento: educación, innovación y tecnología. 'El desafío de la formación', en la que ha repasado las actuaciones del ente provincial en el ámbito de formación.
"La educación tiene que ser siempre un tema de actualidad. Si no es así, estamos abocados a retroceder", ha indicado Salado, que ha destacado el rol del parque tecnológico y la Universidad de Málaga para conseguir que se haya dado "una ola perfecta" en cuanto a la pujanza de la provincia.
Desde su perspectiva, no se debe "caer en la complacencia", sino "seguir trabajando, porque hay muchos temas pendientes". Uno de ellos es, justamente, la formación.
"Los nuevos tiempos son muy cambiantes y hay que adaptarse a las nuevas tecnologías y tendencias. Hemos tenido un poco con retraso en esa adaptación; porque muchas veces la educación pública es muy rígida y la creación de nuevos grados y asignaturas es muy lenta", ha hecho hincapié el presidente de la Diputación.
Salado ha recordado que la anterior administración socialista de la Junta de Andalucía creó "un tapón" en la llegada de universidades privadas a la provincia: "Afortunadamente, con el cambio de gobierno, ya sí hay dos universidades que van a venir a málaga y eso va a suponer un revulsivo importantísimo", ha sostenido.
El máximo responsable del ente provincial ha resaltado también la labor de la Diputación en ese sámbito educativo, pese a que no sean sus competencias: su Plan de Primera Oportunidad, en el que financian gran parte del primer sueldo anual de un recién graduados, ha beneficiado a más de 300 empresas y más de 500 alumnos; mientras que también están "centrados en potenciar el mundo del videojuego", al que le ven gran potencialidad; y en fomentar el emprendimiento tecnológico desde el mundo rural.
"Intentamos dar respuesta a este momento dulce que vive la provincia de Málaga en el área fundamental de la formación", ha concluido Francisco Salado.