Galicia puede presumir de ser una de las comunidades autónomas pioneras en el desarrollo de energías renovables y ahora también quiere serlo en eólica marina flotante e hidrógeno. Son las principales conclusiones del debate "Energías renovables" en el Foro Económico Español 'La Galicia que viene', que organizan EL ESPAÑOL, Invertia, Quincemil y Treintayseis, con la moderación de Oriol Sarmiento, gerente de Cluergal (Clúster de Energías Renovables y Sostenibilidad Energética de Galicia).
"Hay que hablar de luces y sombras en el sector energético gallego", ha señalado Paula Uría, directora xeral de Planificación Enerxética e Recursos Naturais de la Xunta de Galicia.
Lo dice porque "hemos sufrido una transición energética abrupta con el cierre de varias centrales térmicas y eso impacta en el empleo, especialmente en comarcas de la provincia de A Coruña. En cuanto a la parte de luces, Galicia es la segunda comunidad autónoma que más electricidad renovable ha generado en el conjunto del país. Por lo tanto, estamos muy bien posicionados y queremos seguir liderando la transición energética".
Además, "en la Xunta estamos a punto de cerrar la Agenda Energética de Galicia, una hoja de ruta que se basa en varios principios: la eficiencia energética en todos los sectores, la integración de las energías renovables en la red eléctrica, valorización de residuos a través de la metanización y la innovación tecnológica, centrada en energías marinas y de almacenamiento".
"En Galicia, tenemos la experiencia de años de construcción de parques eólicos, tenemos el recurso eólico, los conocimientos, la industria, las empresas promotoras e incluso los recursos humanos", ha señalado por su parte Xabier Monteagudo, responsable de Promoción en Galicia de Capital Energy.
"El dato de que el 40% de los jóvenes de las comarcas gallegas están vinculados al sector renovable es fundamental para entender la realidad en Galicia".
"Es el momento de dar el salto en las tecnologías renovables y continuar apostando por el sector, porque hemos demostrado que somos capaces".
"Soy una persona positiva, pero cada vez me cuesta más. Estamos viviendo momentos especialmente difíciles con los semáforos en rojo, pero que están generando la tormenta perfecta", apunta por su parte Beatriz Mato, directora de Desarrollo Corporativo y Sostenibilidad de Greenalia.
"Hablamos de crisis financiera, con la subida de tipos, las divisas, los precios, de recesión, y se empieza a utilizar un palabro que es la estanflación (recesión con subida de precios)", puntualiza.
"Pero esto tiene que ver mucho con la transición energética, con la subida del petróleo y del gas, además del resto de las materias primas. Además, lo que está haciendo el gigante chino con el abastecimiento de productos".
"Debemos tomar medidas a corto, a medio y a largo plazo. Y en el caso de la eólica marina flotante ya es posible a nivel comercial a día de hoy en profundidades a 100-150 metros con plataforma plana".
Por eso, Beatriz Mato "se tiene que innovar, sí, pero no podemos perder el momento porque ya se puede desarrollar. Desde el primer tornillo hasta el último lo podemos hacer aquí, en Galicia".
"El problema es que seguimos en los papeles, mientras que Italia, Francia o Reino Unido ya están un paso más allá, y nos estamos quedando atrás".
En la misma línea está la tecnológica BlueFloat Energy. Su representante Javier Monfort, country manager en España, asegura que "hace falta reemplazar capacidad fósil por renovables, porque sigue hay mucha industria o mucho sector que depende de los combustibles fósiles si queremos llegar a los objetivos de emisiones cero".
"Y ahí entra la eólica marina, porque permite entrar en aguas profundas que es donde se encuentra el mayor recurso de viento, más estable y tiene un componente carga base, porque casi puede girar 365 días al año".
"Compartimos la idea de una transición energética justa y ordenada, y, más aún, con un puerto que vive de tecnologías fósiles como el gas y el carbón", añade por su parte Martín Fernández Prado, presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña.
"Pero cuando veo empresas como Greenalia, Capital Energy o BlueFloat Energy, sé que volveremos a tener una superproducción de energía en Galicia".
En su opinión, "se ha hecho mucho esfuerzo en penalizar unas tecnologías y se ha impulsado poco otras, por ejemplo, es el caso del hidrógeno verde, del que se ha hablado mucho pero no se ha definido ninguna normativa.