María Neira, directora de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se ha convertido en la voz española dentro de unos de los organismos más importantes a la hora de gestionar la Covid-19. Una experta en cambio climático que apuesta por continuar poniendo en marcha medidas de contención sin dejar de lado saber qué paso en el origen de la pandemia para que no ocurran más.
Durante el acto de clausura de II Simposio del Observatorio de la Sanidad organizado por EL ESPAÑOL e Invertia, Maria Neira ha realizado una velada crítica hacia la cantidad de sistemas de monitorización que se están poniendo en marcha. "Cuando tengamos sistemas tan sofisticados de predicción, ¿les haremos casos?", se ha preguntado irónicamente sabiendo que, aunque se tiene constancia de que la calidad del aire provoca miles de muertes "no hacemos nada".
"Estamos creando unos 'bomberos' para responder a las epidemias, pero también hay que hacer prevención de fuegos y saber en qué fallamos y qué fallos estructurales tenemos y no debemos repetir más", ha insistido.
La directora de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud ha querido aprovechar el foro de EL ESPAÑOL para aclarar algunos titulares que coparon los medios la pasada semana. "No dije que la Covid fuera a terminar en marzo de 2022. Sólo aseguré que, si seguimos con esta tendencia, sería fantástico resolver la situación en una fecha similar, pero no hay ninguna fecha prevista par acabar con el coronavirus", ha explicado.
En un momento en el que el debate es pinchar o no una tercera dosis, Neira ha apostado por la solidaridad y por llegar al 40% de la población global vacunada antes de enero de 2022. Así las cosas, no ha desechado la opción de una tercera dosis para grupos muy vulnerables porque, a su juicio, "no supone un impacto muy importante para el número total de vacunas".
De cara al futuro Neira se sigue viendo con mascarillas en espacios cerrados cree que esa imagen que relacionaba este método de protección con la cultura asiática ha quedado atrás. Aun así, ve positivo que se retiren las mascarillas y no sólo por una cuestión de salud. "Consumimos millones de mascarillas diarias y no debemos de crear un problema con ellas porque no pueden terminan en los océanos y en los peces", ha lamentado.
En este sentido, Neira ha pedido cambios estructurales en la política del aire, la producción de alimentos y la energética. "Tenemos que dejar de pelearnos con el medioambiente. La contaminación es una pandemia que trae siete millones de muertos al año", ha finalizado.