La primera semana de junio ha traído un importante cambio de tendencia en la evolución de la movilidad española. Por primera vez desde que comenzó el proceso de desconfinamiento por fases, el uso del transporte público ha crecido más que el del coche.
Aunque, en términos absolutos, el vehículo individual sigue siendo la opción preferida por los usuarios, los resultados de la cuarta entrega del Estudio sobre la movilidad española de Invertia señala que los usuarios han incrementado durante la última semana el uso de metro, autobuses urbanos o Cercanías.
Este estudio analiza el uso del coche y el transporte público entre el 27 de abril y el 1 de junio en todas las provincias y en 10 ciudades españolas tras el confinamiento. En su realización se han combinado datos de las plataformas de movilidad de Apple, Google, Moovit, junto con la citada información del Ministerio Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, la de la DGT y la de todas las instituciones tanto municipales como autonómicas que han querido colaborar.
Ocho de las 10 ciudades analizadas (Madrid, Valencia, Málaga, Bilbao, Vigo, Las Palmas de Gran Canaria, Zaragoza y Palma de Mallorca) registran incrementos superiores del transporte público frente al vehículo. Tanto es así que Valencia, Bilbao, Vigo y Palma de Mallorca alcanzaron crecimientos de doble dígito en la utilización de estos servicios entre el 25 de mayo y el 1 de junio.
Bilbao y Valencia, capitales del transporte público
Al analizar individualmente las ciudades, Bilbao y Valencia continúan estando muy destacadas del resto en la vuelta a la actividad. Pese a que, como en todas las poblaciones analizadas, el coche se impone como opción de movilidad, en ambas la recuperación del transporte público es muy importante. En Bilbao llega al 80% de los registros previos a la pandemia, mientras que en Valencia alcanza el 63%.
Las poblaciones más cercanas en esta categoría serían Vigo y Palma de Mallorca con niveles de uso mucho menores ya que no alcanzan el 50% de la recuperación. Una distancia muy significativa que aún se incrementa más al compararlas con las otras seis poblaciones analizadas, todas ellas con niveles de uso del transporte público por debajo del 30%.
La mayor velocidad de adopción del automóvil como medio de transporte para desplazarse durante las pasadas semanas se puede apreciar en el gráfico anterior. Todas las ciudades se mueven más rápidamente de izquierda a derecha (incremento de tráfico) que de abajo a arriba (incremento de uso del transporte público). Para entender mejor esta evolución hemos trazado una diagonal entre los ejes X e Y.
Cuanto más cerca está una representación de una ciudad de esta línea, más balanceada es la evolución del uso del coche y del transporte público. El avance por debajo de esta línea señala un mayor peso del automóvil respecto al transporte público. Si un punto cruza esta linea y pasa a la parte superior, el transporte público está creciendo con más fuerza que uso del vehículo individual en esa ciudad.
Esta visualización aún destaca más a Valencia y Bilbao como las ciudades con un crecimiento más equilibrado entre coche y transporte público. En lo que respecta al uso del automóvil, el estudio señala que siete de las 10 ciudades analizadas ya han superado la barrera del 70% de recuperación.
En Bilbao, Valencia y Vigo la utilización del vehículo individual alcanza el 80% del nivel previo al confinamiento. Esta barrera es importante ya que, según las estimaciones de varios municipios, la caída del turismo sumada al teletrabajo y la reducción de las actividades de ocio van a reducir un 20% el total de los desplazamientos cuando se completen todas las fases de la desescalada. Con la llegada de la Fase 3 a la vuelta de la esquina parece evidente que el coche superará pronto ese nivel de recuperación en varias de las ciudades analizadas.
La movilidad provincial llega al 83%
A nivel provincial, el nivel de actividad se sitúa ya en el 83%. Madrid y Barcelona vuelven a destacarse como los territorios con menor movilidad provincial. Ambos territorios son los únicos que quedan por debajo del 70% de la actividad. Así como la pasada semana ambas provincias protagonizaron incrementos notables, durante la pasada semana la movilidad se ha mantenido en niveles similares. Un 66% Barcelona y un 61% frente a los niveles previos al confinamiento.
38 de los 52 territorios analizados registraron incrementos de movilidad. Entre las provincias con más actividad se encuentran Lugo, Orense, Tarragona y Toledo, todas ellas han recuperado el 90% de los desplazamientos previos al Estado de Alarma. Sólo ocho provincias registran un ratio de movilidad por debajo del 80%.
En este punto será importante analizar que efecto tendrá en la movilidad provincial la apertura a que se realicen desplazamientos entre Comunidades Autónomas. Una posibilidad que se abrirá tras la llegada de a la Fase 3 y la toma de control de los gobiernos autonómicos de este tipo de decisiones.
Tendencias similares para Madrid y Barcelona
En lo que respecta a los patrones de recuperación de movilidad de las grandes ciudades españolas, Madrid y Barcelona siguen dibujando tendencias muy similares. El indicador que muestra una mayor diferencia entre ambas es el uso del coche. La Ciudad Condal vuelve a destacarse seis puntos porcentuales por delante de la capital de España en este ratio.
En el incremento de la utilización del coche en Barcelona durante durante los últimos siete días influye que esta semana se permitieron desplazamientos entre la ciudad y el Área Metropolitana por primera vez desde que arrancara el confinamiento. Hasta el pasado lunes, Barcelona había estado separada como región sanitaria única y, por lo tanto, no podían realizarse ni entradas ni salidas de la ciudad.
Al analizar la recuperación del transporte público, las dos ciudades registran niveles muy similares en el uso del Metro, un 30,8% de recuperación en Barcelona frente a un 29,5% en Madrid. El principal cambio lo encontramos esta semana en el incremento del autobús urbano donde Madrid supera a la capital catalana. Por su parte, los autobuses interurbanos y los servicios de cercanías ferroviarios siguen registrando una recuperación de actividad mayor en Madrid que en Barcelona.
En lo que respecta a los desplazamientos a pie, esta semana no se han registrado cambios significativos respecto a la pasada. En esta métrica, si se confirma el paso de las dos ciudades a Fase 2, podemos esperar un impacto importante ya que en la nueva fase desparece la restricción de horarios para salir de casa.
Así las cosas, España encara la próxima semana el último gran cambio de escalón antes del desconfinamiento total. Además del paso de Madrid y Barcelona a la Fase 2, se espera que gran parte del territorio pase a Fase 3. Un punto en el que además de una mayor flexibilidad para retomar todas las actividades, será el turno de los gobiernos autonómicos de tutelar los últimos pasos antes de que todas las provincias vuelvan al estado previo a la puesta en marcha del Estado de Alarma.