Imagen de un hombre fumando un cigarro.

Imagen de un hombre fumando un cigarro. Istock

Invertia

Malas noticias para los fumadores: este será el precio del tabaco y los vapers en 2025

Mariana Goya
Publicada

Son muchas las novedades que puede traer el próximo año: el (posible) cambio en el precio del transporte público, el aumento en el sueldo de los funcionarios, el mercado inmobiliario... Y una que sólo afectará al bolsillo de los fumadores y vapeadores

Así lo anunciado el pasado 30 de octubre el Gobierno. Aquel día, mientras debatían sobre el impuesto extraordinario a las empresas energéticas, el ejecutivo aprovechaba para subir los impuestos de otros productos y, entre ellos, del tabaco y de los cigarrillos electrónicos. 

Su objetivo es aumentar los ingresos fiscales y reducir el consumo de productos relacionados con la nicotina. Y es que esta reforma ha decidido poner el foco en reforzar las políticas de salud pública, pero también lo ha hecho para abordar el auge de los vapers entre los jóvenes, un fenómeno cada vez más preocupante. 

¿En qué se traduce todo esto? Muy sencillo, habrá un incremento en el precio de los productos que contengan nicotina.

De este modo, los afectados serán los fumadores tradicionales, pero también aquellos que han optado por adentrarse al mundo de la adicción a través de las nuevas apuestas, como el tabaco calentado o los cigarrillos electrónicos

Aumento en el precio del tabaco

Hoy día, el precio promedio de una cajetilla de tabaco en España ronda los 4,60 euros. Con la nueva reforma fiscal, el precio por cajetilla subiría alrededor de 37 céntimos, lo que llevará el precio medio a casi 5 euros. Esto, para el fumador habitual que consume una cajetilla diaria, supone un gasto adicional de más de 130 euros al año. 

Pero esto es todavía más preocupante cuando hacemos zoom out a la escena. Actualmente, un fumador promedio ya destina más de 1.250 euros anuales al consumo de tabaco y, con esta subida, esta cifra podría superar fácilmente los 1.380 euros. 

El otro sector fuertemente afectado con esta medida será el de los cigarrillos electrónicos que, hasta ahora, habían mantenido precios más accesibles en comparación con el tabaco tradicional. Sin embargo, con la puesta en marcha de esta política, por primera vez, los líquidos de vapeo estarán sujetos a un impuesto especial que se calculará en función de concentración de la nicotina. 

  • Líquidos con hasta 15 mg/ml de nicotina: pagarán 0,15 euros por mililitro.
  • Líquidos con más de 15 mg/ml de nicotina: pagarán 0,20 euros por mililitro.

Esto se traduce en un encarecimiento considerable para quienes recurren a estos dispositivos de manera habitual. Por ejemplo, un vapeador que consume tres mililitros al día verá su gasto diario aumentar en 60 céntimos, lo que equivale a 219 euros más al año. 

Sin embargo, pese a que también existen estas opciones con líquidos sin nicotina, estas también estarán sujetas a la subida de impuestos (aunque su impacto será menor como consecuencia de su baja o nula concentración). 

Por otro lado, las bolsas de nicotina —un producto emergente en España— tampoco se libran de la reforma. Esta moda consiste en un pequeño paquetito relleno de un polvo blanco (que no es lo que te piensas) y que los consumidores se lo colocan entre la encía y el labio para liberar la nicotina de manera gradual. Y sí, también sufrirá un incremento en su precio que será de 0,10 euros por gramo. 

Aunque esta reforma sitúa a España en línea con las tendencias fiscales europeas, el país aún espera la coordinación de impuestos sobre los productos de vapeo a nivel de la Unión Europea. Además, Canarias, Ceuta y Melilla, como es habitual, quedan excluidas de estas medidas debido a su régimen fiscal especial.