Impacto visual que iba a tener el proyecto descartado de Bosonit.

Impacto visual que iba a tener el proyecto descartado de Bosonit.

La Rioja

Logroño retiene el centro de alto rendimiento 'tech': un alivio no exento de dudas

Tras plantearse llevarse el proyecto a otra región, Bosonit se enfrenta ahora a la gestión de retrasos, a la lupa de la UNESCO o la necesidad de cumplir los requisitos del gobierno autonómico en materia de empleo.

16 junio, 2024 01:42

Cuando en el año 2021 comenzó a hablarse de este proyecto, seguramente hubo quien soñó con que, más de tres años después, ya estaría operativo. Y seguramente hubo, porque siempre los hay, quien desconfió. Las cosas de palacio suelen dar la razón a los más cautos.

Estamos en 2024 y el centro de alto rendimiento tecnológico (HIT, por sus siglas en inglés) que la compañía Bosonit anunció hace tres años sigue sin haber comenzado sus obras en su ubicación prevista, el centro histórico de Logroño.

Este mes de junio, al menos, comenzó con una buena noticia: el Ayuntamiento de la capital de La Rioja ha salvado una especie de bola de partido, que tenía que ver con la presunta idea de Bosonit de llevarse su flamante HIT a otro lugar. Se habló de Navarra, aunque nunca nadie ha confirmado este hecho.

El partido continúa. El HIT se construirá en Logroño. Con retraso, pero se construirá. Ahora bien, seguimos estando ante cosas de palacio y, ya se sabe, las dudas no suelen desaparecer tan rápido como llegan las buenas noticias.

Para analizar el escenario que se abre a partir de ahora hay que recordar de dónde venimos y por qué se ha llegado a esta situación.

El HIT, un centro que tiene previsto incluir formación, laboratorios, una aceleradora y una residencia, se anunció en 2021 y un año después, con el objetivo de agilizar su tramitación, el gobierno de La Rioja lo declaró Proyecto de Interés Estratégico Regional (PIER), obligándole a cumplir una serie de requisitos en materia de plazos y de contratación de personal.

Cuando todo parecía estar controlado, se hizo el silencio y comenzaron las preguntas. Se conoció a finales de 2023 que un informe de la UNESCO había advertido ciertos perjuicios del proyecto a la fachada patrimonial del casco histórico de la ciudad. Eso fue el detonante de un presunto tira y afloja en el que incluso se llegó a barruntar la posibilidad de que se paralizara la iniciativa que, dicho sea de paso, ya en aquel momento disponía de diseño, distribución de espacios y estrategia de funcionamiento.

Los líderes locales tuvieron que explicar públicamente que harían lo que estuviera en su mano para que Bosonit no se llevara el HIT a otra región, señal de que los rumores algo de cierto llevaban.

Así que, visto el camino recorrido, el mejor escenario posible era el acuerdo al que se ha llegado recientemente.

El acuerdo tiene que ver con la firma de un nuevo convenio urbanístico que permitirá mantener el centro de alto rendimiento de nuevas tecnologías de la empresa en el casco antiguo de la ciudad respetando la integridad patrimonial del entorno.

"Agradezco la disposición de la empresa durante estos meses en los que hemos mantenido numerosas conversaciones que hoy finalizan con una buena noticia para la ciudad. Este equipo de gobierno siempre ha defendido el apoyo a un proyecto empresarial que dinamizará el casco antiguo de la ciudad y la necesidad de salvaguardar nuestro patrimonio histórico y cultural. Ambos objetivos se consiguen con el acuerdo cerrado hoy", admitió aquel día el alcalde, Conrado Escobar.

El acuerdo, añadió, "beneficia a Logroño, nos permite apostar por el futuro de la mano de una empresa puntera a nivel tecnológico, pero manteniendo la esencia patrimonial de nuestro pasado. Un proyecto que revitalizará el Casco Antiguo y que atraerá talento a nuestra ciudad con una empresa local que demuestra el compromiso con su tierra". Son palabras similares a las que pronunció su antecesor, Pablo Hermoso de Mendoza, hace tres años.

La diferencia es que ahora se han salvado algunos obstáculos que en aquel momento no se preveían.

El acuerdo alcanzado entre el Ayuntamiento de Logroño y Bosonit supone que la empresa mantendrá su centro de alto rendimiento de nuevas tecnologías en el casco antiguo de Logroño, en la parcela situada en la calle Marqués de San Nicolás con un nuevo proyecto que rebajará alturas respetando la integridad patrimonial del entorno y traspasando esa edificabilidad a otra parcela. La altura del edificio se rebaja en dos alturas cumpliendo de esta manera los citados requerimientos determinados por organismos como la UNESCO.

El texto del convenio urbanístico se está cerrando y será publicado en el Boletín Oficial de La Rioja durante las próximas semanas. A partir de ahí se abrirá un periodo de alegaciones tras el cual el convenio deberá aprobarse en el pleno municipal.

Desistimiento del proyecto anterior

Por su parte la empresa, en el plazo de cinco días a partir de la firma del convenio, desistirá de la solicitud de licencia conjunta de obras y ambiental y del anterior proyecto básico presentado para la construcción de edificio de oficinas y residencia.

A partir de ese momento, Bosonit iniciará el procedimiento administrativo del nuevo proyecto según los aspectos recogidos en el convenio urbanístico de planeamiento suscrito entre ambas partes. El Ayuntamiento, por su parte, declarará la urgencia en la tramitación de las licencias de obra y actividad con el objetivo de agilizar el nuevo proyecto.

Dicho esto, es evidente que tanto la empresa como el Ayuntamiento deben gestionar todo lo que supone que este proyecto vaya a acumular años de retraso. Un proyecto que estaba previsto que se pusiera en marcha este mismo año va a tener que esperar al menos otros dos años para ver la luz.

Y eso siempre que todo vaya según lo previsto. Ya se sabe que cuanto más se dilata un proyecto en el tiempo, más posibilidades hay de que sufra retrasos, con causas diversas: cambios normativos o legislativos que afecten a las obras, situaciones imprevistas que tengan que afrontar la empresa constructora o la empresa promotora… En cualquier caso, sólo son suposiciones en un proyecto, eso sí, que lo que necesita son realidades.

Pero tal vez el principal caballo de batalla llegaría al analizar algunos aspectos de aquella declaración de Proyecto de Interés Estratégico Regional (PIER) aprobada por el gobierno de La Rioja.

No parece que vaya a afectar en exceso uno de los puntos, que hablaba de que la empresa, para beneficiarse de todas las ventajas de convertirse en PIER, tenía un plazo máximo de 24 meses para que el HIT estuviera en funcionamiento a partir de la concesión de la licencia de obras y de ocupación. Como esta licencia aún no se ha concedido, puede decirse que Bosonit está en plazo.

¿Pero qué hay del condicionante establecido por el cual Bosonit tenía que haber contratado a 200 personas en diciembre de 2024? No ha habido noticias al respecto de si este condicionante puede suponer algún obstáculo en lo sucesivo, pero desde luego, si Bosonit lo cumple será porque ha contratado personal específico antes incluso de que se cumpla el primer mes del inicio de las obras.

Porque es, efectivamente, en diciembre de 2024, cuando algunas fuentes hablan de que podrían comenzar las obras de este esperado centro de alto rendimiento tecnológico.

Insistimos, siempre que todo siga su curso y no haya complicaciones, habrá que tener en cuenta también aspectos como el hecho de que la UNESCO va a seguir estudiando con lupa todo lo que se haga en esa parcela y máxime tras haber hecho ya la famosa advertencia que acabó reconfigurando todo el plan. En resumen, ni Bosonit ni el Ayuntamiento van a poder cometer el más mínimo error.