Mutter Ventures saldrá a Bolsa a finales de año y se convertirá en el primer venture builder -o fábrica de startups- español que cotiza en el mercado de valores. La compañía, fundada en diciembre de 2018 por un grupo de emprendedores e inversores, llevará a cabo el hito en el parqué parisino mediante listing técnico, dentro del mercado EuroNext Access.

Su CEO asegura a D+I que no será un caso aislado y que "habrá muchos más movimientos" en el ecosistema español en el futuro. La pandemia ha acelerado la transformación digital y emprender en este área "ya no es una segunda opción". Sobre la adopción de la filosofía de Silicon Valley en España, Rodríguez está convencido de que, aunque aún estamos lejos de ese modelo, "ya se está adaptando a nuestras posibilidades".

¿Qué supondrá en la práctica la próxima cotización en el mercado de valores, en concreto en la Bolsa de París, para su compañía? 

Nos supone, sin duda, un punto de inflexión en nuestra trayectoria. Seguimos con los mismos objetivos fundacionales pero con muchas más opciones en lo que a partnerships, acceso a capital o a talento se refiere. Y todo eso significa más posibilidades de éxito.

Un proyecto como el nuestro, que se basa en construir futuro, en localizar, entender, proyectar y ejecutar oportunidades de negocio de manera constante, necesita disponer de un acceso a recursos de manera ágil.

Para nosotros, los recursos van desde los mejores compañeros de viaje para el desarrollo de un proyecto, hasta el capital para la etapa de crecimiento de un proyecto más sólido. Y esta velocidad y estructura corporativa no la puedes conseguir tan fácilmente si no piensas en grande y en global.

Ser los primeros no siempre es lo mejor pero, en este caso, estamos siendo los primeros como venture builder en España. No obstante, han sido muchos los players internacionales de reconocido prestigio y éxito que han seguido previamente el mismo camino y, por lo tanto, nos sentimos cómodos.

Creemos que habrá muchos más movimientos en el ecosistema en esta misma dirección.

¿Pensaron en 2018, cuando arrancó su proyecto, que era posible tener tal proyección y llegar a este punto?

Sinceramente en cuanto a la estructura corporativa a la que finalmente estamos llegando, no. Éramos ambiciosos en querer llegar a ser un venture builder referente y, por supuesto, en confirmar nuestra tesis de inversión y desarrollo de negocios.

Lo que no teníamos previsto era acabar en una estructura empresarial que estuviera cotizando y, menos aún, en una Bolsa internacional.

A medida que hemos ido avanzando en estos tres años desde nuestra constitución, y viendo las necesidades financieras y oportunidades que han resultado de los proyectos, la opción de cotizar ha ido cogiendo mucha fuerza. Ahora estamos convencidos de que es la mejor decisión que podíamos haber tomado.

¿Cómo ha afectado la crisis del coronavirus a su negocio? ¿Ha sido un revulsivo para la transformación digital? 

A nosotros nos ha afectado positivamente. Ha sido en los últimos 18 meses cuando más ha crecido el proyecto, el equipo y la ambición. Nuestra propuesta de valor de creación de nuevos proyectos digitales, con la intención de ser vendidos, ha cogido aún más fuerza y sentido en un momento en el que los grandes players se han dado cuenta de la necesidad de acelerar sus estrategias de digitalización.

En resumen, más operaciones de M&A, más inversión en digitalización, más creencia en las nuevas maneras de entender los negocios, etc. Y eso está en el ADN de Mutter.

¿Cuál es su diagnóstico de salud del ecosistema startup español?¿Hacia dónde se dirige?

Es un ecosistema maduro y los datos así lo reflejan. Llevamos más de una década aprendiendo del ecosistema y creándolo. Un ciclo que ya ha traído consigo grandes éxitos, emprendedores con mucha experiencia, corporates que ya se creen la necesidad de colaborar con startups, inversores que ven necesario diversificar su cartera incluyendo una parte de ésta en el venture capital, escuelas de negocios que apoyan el emprendimiento y un largo etcétera.

Y éste es el motivo por el que tenemos ecosistemas tecnológicos en nuestro país referentes a nivel internacional. Estamos solo al inicio de todo lo que está por llegar.

Emprender en el sector digital ya no es una opción de segundas, es una opción clara y sólida. Por este motivo, el perfil del emprendedor también ha cambiado aumentando su edad media.

¿Está consolidándose en España la filosofía de Silicon Valley de grandes proyectos emprendedores que están dejando atrás a aquellos más comedidos y modestos?

Es una realidad y así lo demuestran los estudios realizados. Los proyectos con más inversión y, por tanto, ambición, acaban siendo referentes de sus sectores, llegando más lejos, o contando con una estrategia de exit más sólida. Y si lo piensas, es normal.

Todo el camino que va desde el lanzamiento de un proyecto hasta su consolidación está lleno de trabas. Desde acertar en tus decisiones y asumir las equivocadas, hasta competir con terceros o directamente 'educar' ese mercado con un producto nuevo. Y eso es dinero e inversión.

Creo que cada vez hay más proyectos que entienden eso y, por lo tanto, cada vez hay emprendedores más maduros e inversores que apuestan más y mejor. Estamos lejos de la realidad de Silicon Valley pero cerca de adaptar esa filosofía a nuestras posibilidades.

¿Qué sectores están emergiendo con más fuerza en esta era poscovid en el sistema startup español?

Todas esas áreas que provienen de mercados maduros en términos de tamaño pero con alta capacidad de innovación. Los productos/servicios que aportan valor e innovación en sectores con millones de clientes con ganas de mejorar son muy interesantes para inversores que, al fin y al cabo, son los que acaban dando alas a los proyectos que destacan en el mercado.

Software de mejoras y optimización para empresas, empresas que promueven la enseñanza online, empresas especializadas en salud mental, empresas relacionadas con deuda, entre otros, serían algunos de los sectores que para nosotros generarán más ruido.

Excesiva burocracia, un marco normativo no adaptado a las particularidades de las empresas emergentes, la siempre necesaria financiación, etc. ¿Qué otros obstáculos para el desarrollo de las startups españolas podría añadir?

Podría mencionarte decenas de retos. Pero quizá uno de los puntos que más impacto tiene es el talento. Ya no solo desde el punto de vista de que es muy difícil con los recursos iniciales con los que cuenta una startup poder pagar y convencer a ese talento, sino también que el perfil que necesitas en los 6 primeros meses de vida de un proyecto podría ser totalmente diferente al de los 6 meses siguientes.

Si piensas en que lo importante es saber identificar qué quieres en cada momento del proyecto, y la clave que es saber decir 'no'. Saber priorizar. Entender que de la misma manera que hay momentos en los que necesitas simplemente descubrir si hay interés en tu hipótesis, dejando totalmente de lado el producto, también los hay en que tu producto debe ser perfecto para poder escalar al nivel que necesitas.

Y eso es experiencia, skills diferentes y objetivos que cambian según las fases que vas avanzando. Eso es un reto operativo y una bomba emocional para los CEOs.

¿Qué mensaje le lanzaría a esa startup que tiene un proyecto incipiente pero muchas dudas sobre cómo afrontarlo?

Objetivos claros y medibles. Es importante fasear muy bien cada etapa y entender muy bien el entregable de cada una. Estés donde estés de tu proceso de creación de tu startup, tienes un top 3 de objetivos. Focalízate en ellos. Muchas veces no es cuestión de recursos, es cuestión de saber priorizarlos.

A veces no nos damos cuenta de que, en muchas ocasiones, va de calidad y no de cantidad.