El crecimiento récord de la afluencia turística parece que no se corresponde con el resto de variables. En lo que llevamos de 2016, de los casi 65 millones de personas que viajaron a España, más de 22,5 millones no pasaron ni una noche en nuestro país, lo que supone casi un 35% del total, según los últimos datos de la estadística Frontur del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Esta tendencia se mantiene si se analizan los datos mes a mes. Por ejemplo, en julio, la duración del viaje de hasta 4,5 millones de visitantes fue inferior a un día, lo que supone casi una de cada tres personas que viajaron a España durante ese mes, dato que aumentó un 35,4% con respecto a junio.
¿Qué hacen entonces en España? El INE no lo sabe porque esas personas no dejan rastro. Puede que estén en España como punto de partida a otro destino, que se queden en domicilios particulares o que contraten alojamientos alternativos, como Airbnb o plataformas similares. Todas esas opciones no aparecen en las estadísticas oficiales. En ellas sólo tienen cabida quienes pernoctan en hoteles, apartamentos, campings, alojamientos de turismo rural y albergues.
El INE, en su metodología, no denomina a este tipo de visitantes como turistas sino como 'excursionistas' ya que, para el organismo, turista es aquel viajero que realiza al menos una pernoctación en el país de destino.
Según las estadísticas de lo que llevamos de año, de entre los que sí pernoctaron, casi la mitad realizaron una estancia de entre 4 y 7 noches. En concreto fueron 20,5 millones de turistas, lo que supone un 31,5% del total de viajeros que llegaron a España entre enero y julio.
La segunda opción más demandada por los visitantes extranjeros es pasar una estancia de entre 8 y 15 noches, utilizada por hasta un total de 10,3 millones de personas, lo que representa un 16% del total de visitantes.
Por contra, la alternativa menos preferida para la estancia es la de una noche. Así, a lo largo de 2016, sólo 1,72 millones de turistas se hospedaron en España durante una única noche, dato que representa un 2,6% del total. De este modo, el modelo turístico mayoritario que desprende esta encuesta es el siguiente: no pernoctar (o hacerlo en alojamientos no regulados) o hacerlo más de 4 días.
Desconfianza en los datos
Desde el sector no se ‘creen’ demasiado estos datos. “Nos sorprende que no se sepa dónde se alojan”, señala el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, Juan Molas, señalando a los establecimientos no regulados como fuente de pernocta de estos viajeros. Es decir, los que se alojan en Airbnb o en plataformas similares.
Pese a que desde AEHAT no creen que pueda haber 20 millones de personas que han visitado España y no hayan pasado ni siquiera una noche, este mismo panorama se produce si analizamos únicamente los datos del mes de julio.
En esos 31 días, el 32% de quienes visitaron España no pernoctaron ni una noche; y entre quienes sí se quedaron, la opción preferida es la estar entre 4 y 7 días alojados. Un total de 4,3 millones de turistas se acogieron a esta opción, lo que abarca un 30% del total y un 45% de las pernoctaciones. La estancia de entre 8 y 15 días es la segunda más demandada por los turistas en julio, algo más de 3 millones de turistas, el 22% del total.
Al igual que en los datos agrupados, la estancia menos demandada en julio es la de una noche, opción a la que se acogieron 384.000 personas, un 2,7% de los viajeros.
¿Un turismo ‘low cost’?
Al igual que la llegada de turistas, las pernoctaciones también crecieron. Durante los siete primeros meses de 2016, las estancias aumentaron un 8,9% respecto al mismo periodo del año anterior. Sin embargo, el tiempo medio se ha recortado respecto a julio de 2015: baja un 1,5%, situándose en 3,7 'noches' por viajero, según el INE.
Más concretamente, durante el mes de julio, las pernoctaciones en el conjunto de alojamientos turísticos reglados (hoteles, apartamentos, campings, alojamientos de turismo rural y albergues) aumentaron un 7,5% interanual, aunque del mismo modo, la estancia media se redujo un 2,6% en este mes, situándose en 4,1 pernoctaciones por viajero.
En cuanto a los ingresos, se han beneficiado del incremento del número de turistas con una subida pero a una velocidad inferior. Los turistas extranjeros que visitaron España entre enero y junio gastaron un 8,2% más que en el mismo semestre de 2015, hasta 32.685 millones de euros, según la encuesta Egatur publicada por el INE. No obstante, cada turista desembolsó por sus vacaciones en España una media de 997 euros, una cifra un 3,13% inferior a la registrada en los seis primeros meses de 2015.
Crecimiento de ‘doble velocidad’
El Banco de España también ha reflejado la ‘doble velocidad’ a la que crecen la llegada de turistas y cuánto se gastan. Los ingresos por turismo extranjero en España crecieron un 5,3% en el período enero-mayo, hasta alcanzar un volumen de 17.096 millones de euros, según refleja la balanza de pagos. Cabe recordar que durante ese mismo período, en los cinco primeros meses de 2016, el número de turistas que visitaron España aumentó prácticamente el doble, un 11,4% en tasa interanual, superando los 25,2 millones de viajeros.
La inestabilidad de los países competidores del Mediterráneo, como Turquía, explican este incremento de afluencia sin que, de momento, el ‘brexit’ y la depreciación de la libra parezca afectar al sector, aseguran desde CEHAT. “El ‘brexit’ de momento no ha afectado al turismo en términos de afluencia, aunque a lo mejor es posible que reduzca el gasto por turista debido a la ponderación libra/euro”, afirma Juan Molas.
La demostración es que uno de cada cuatro turistas en julio (de los que pernoctaron al menos una noche) era residente en Reino Unido, constituyendo un 23% del total y un incremento del 11,4% respecto de julio del año pasado.
En lo que llevamos de año, el ranking de países emisores de turistas lo encabeza Reino Unido, que ha sufrido un incremento del 15,3% respecto de los siete primeros meses de 2015. Le siguen Francia y Alemania con un 15,9 y 13,4% del total de turistas, respectivamente.