El Banco de Japón mantiene sin cambios las tasas y su programa de estímulos
El Banco de Japón decidió este viernes mantener en el mismo nivel sus tasas de interés de referencia y continuar con su programa de estímulo monetario, mientras anticipa "alguna debilidad" en el nivel de las exportaciones niponas.
La decisión fue anunciada en un comunicado del instituto emisor al final de la reunión de dos días que mantuvo el Banco de Japón (BoJ) para revisar mensualmente la política monetaria.
El BoJ anunció que, por una mayoría de 7 votos a favor y 2 en contra, se decidió mantener en el -0,1% la tasa de interés a corto plazo para los depósitos de instituciones financieras en el instituto emisor.
Asimismo, seguirá con sus compras de bonos del Gobierno para que el rendimiento de los que tienen un plazo de 10 años se mantenga en torno al 0%.
Esas compras se harán "de una manera flexible" para que la cantidad remanente se incremente a un ritmo anual de 80 billones de yenes (633.000 millones de euros/716.428 millones de dólares).
El instituto emisor "tiene intención de mantener los actuales niveles extremadamente bajos de los intereses a corto y largo plazo por un extenso período de tiempo", señala el comunicado.
Seguirá con esa política "teniendo en cuenta las incertidumbres sobre la actividad económica y los precios", incluyendo lo anunciado incremento del IVA en octubre, que pasará desde el 8% al 10%.
También anunció que, además de la compra de bonos del Gobierno, continuará adquiriendo en el mercado participaciones de fondos de inversión cotizados o ETF y de inversiones del sector inmobiliario, también con un aumento progresivo de las cantidades remanentes.
En su análisis sobre la coyuntura, el BoJ considera que la economía de Japón se está expandiendo "moderadamente", aunque "las exportaciones y la producción se han visto afectadas por una desaceleración de las economías de otros países".
Acerca de la inflación, que el BoJ espera llegue en algún momento a su meta del 2%, el instituto emisor nipón cree que seguirá en los mismos niveles, en un rango del 0,5% - 1,0%.
Entre los riesgos globales que mencionó el instituto emisor nipón figuran las políticas macroeconómicas de EEUU y su impacto en los mercados financieros, el creciente proteccionismo y las consecuencias del Brexit.
En una rueda de prensa posterior a la difusión del comunicado oficial de la reunión, el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, expresó su confianza de que la economía global se recupere en la segunda mitad de este año.
Kuroda afirmó que el objetivo de una inflación del 2% se mantiene sin cambios, y cree que las negociaciones en curso en las empresas para fijar aumentos de salarios podrían impulsar un progresivo acercamiento hacia esa meta.
Japón mantiene su actual política de estímulo monetario desde 2013, que tiene, entre otros objetivos, alcanzar una inflación del 2%. Este país cerró 2018 con una inflación del 0,9% y con un aumento del 0,8% en su producto interno bruto (PIB).