Tecnocasa propone vivienda en bajos comerciales y rechaza los "pisos colmena"
Madrid, 18 feb (EFECOM).- La inmobiliaria Tecnocasa considera que los "pisos colmena" que existen en Barcelona y que están a punto de llegar a Madrid no son ninguna "solución imaginativa" al problema de los precios y propone en su lugar otras fórmulas, como convertir en casas los bajos comerciales vacíos.
Para el catedrático de Economía de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y coordinador de los informes semestrales sobre el mercado de la vivienda de Tecnocasa, José García Montalvo, las soluciones imaginativas a las dificultades para acceder a una vivienda "pasan por generar viviendas que sean habitables y un habitáculo de esas proporciones no es ninguna forma de vivir original".
García Montalvo, que forma parte del equipo de expertos designado para elaborar el índice de referencia de precios del alquiler del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), ha abogado por "utilizar como residencias, con cédulas de habitabilidad, los bajos comerciales y de oficinas vacíos que nunca más van a ser un comercio porque la venta por internet se los han comido", como han propuesto esta semana en ciudades como Nueva York.
A su juicio, la administración debería ser más "flexible" con las cédulas de habitabilidad en este ámbito, si de verdad considera que existe un problema de acceso a la vivienda.
García Montalvo, que ese ha referido a este asunto en la presentación del informe de Tecnocasa y la UPF correspondiente al segundo semestre de 2019, ha explicado que desde hace unos años se está produciendo en España un "cambio hacia el alquiler".
Según sus datos, el porcentaje de vivienda en alquiler representaba el 9 % en 2005, una tasa "absurdamente baja", cuando los niveles "razonables" en los países europeos se sitúan entre el 30 % y el 40 %.
Entre otras causas, ha destacado que toda la vivienda protegida que se ha construido desde 1980 ha sido en régimen de compraventa y ha apuntado que, si hubiera sido en alquiler, el sector público tendría en la actualidad un parque de más de dos millones de pisos par arrendar.
Ha recordado que la excepción es el País Vasco, que hace tiempo decidió que las viviendas públicas serían de alquiler y que ninguna casa que se pagara con dinero público pasaría al mercado privado.