España va a aumentar su producción de girasol alrededor de un 10% en esta campaña ante la buena perspectiva de precios en el mercado por la guerra en Ucrania, el principal productor de esta oleaginosa.
La cuenca del Guadalquivir y la del Guadiana serán las zonas en las que más se incremente este cultivo ante la escasez de agua disponible para otras siembras que precisan mayor dotación hídrica. En el caso de Andalucía, se baraja que aumenten hasta un 24% las toneladas de este cultivo.
En general, en España se prevé que se pase de unas 750.000 toneladas de pipas de girasol a casi 900.000, según ha explicado a EL ESPAÑOL-Invertia Pedro Villa, bróker de semillas oleaginosas en Northstar Brokerage.
Cinco millones menos en Ucrania
Los cinco millones de toneladas de menos de la producción de Ucrania se paliarán con el incremento en Europa y en otros orígenes. La previsión es que países europeos como España, Francia, Rumanía o Italia incrementen sus cosechas.
Por qué más en España
La Unión Europea ha permitido este año a los agricultores sembrar el 5% de sus hectáreas, que hasta ahora debían permanecer en barbecho obligatorio para poder cobrar la Política Agraria Común (PAC). España cuenta con 2,2 millones de hectáreas sin cultivar, casi un 10% de las declaradas como tierras de cultivo.
Además de sembrar esas hectáreas, otro punto que juega a favor del girasol es su menor consumo hídrico. En zonas como Andalucía, que se encuentra en situación extraordinaria de sequía desde otoño, algunos cultivos de regadío se están cambiando por el girasol.
La sequía favorece al girasol
Recientemente, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha anunciado que la dotación máxima de metros cúbicos por hectárea será de 1.750 frente a los 1.000 que comunicó en febrero, antes de que se registraran las lluvias de marzo. Sin embargo, esta cifra sigue estando muy alejada de la dotación máxima normal: 6.000 metros cúbicos por hectárea.
Otros argumentos a favor de la siembra de este cultivo son la disponibilidad de semillas y la suficiente capacidad de la industria molturadora española (la que muele granos o frutos), según apuntaron a este periódico fuentes del Ministerio de Agricultura.
Andalucía, Castilla y León y Castilla-La Mancha son las tres comunidades en las que se cultiva mayor superficie de girasol. La previsión es que, precisamente, las cuencas que bañan estas comunidades -Guadalquivir y Guadiana- sean en las que más se aumente este cultivo.
"El agricultor está tranquilo, nunca ha visto estos precios en 50 años ni en girasol, ni en trigo blando ni duro", explica a este medio Luigi Vascello de Northstar Brokerage. Los precios han ido en aumento a en 2020 y 2021 y, como consecuencia de la guerra, la previsión es que continúe la tendencia alcista en este 2022.