La ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Europa Press

Economía

La presión fiscal alcanzará el 41% del PIB en 2023 tras subir casi cinco puntos desde que Sánchez llegó a la Moncloa

CEOE advierte de la huida de talento, mientras Freemarket estima que el impuesto a la Solidaridad lastrará el PIB entre el 0,5 y el 2,5% en 2030.

11 octubre, 2022 02:46

La presión fiscal en España alcanzará el 41% del PIB en 2023, un dato con el que nuestro país prácticamente se equiparará a la media de la Unión Europea (41,3%), según la CEOE.

Aproximar la recaudación fiscal en España a la media de los Veintisiete era uno de los objetivos del Gobierno para esta legislatura, pero los empresarios denuncian que se ha pedido este esfuerzo en un momento de dificultades económicas. En la legislatura, la presión fiscal saltará desde el 35,2% en el que cerró en 2018 y 2019 al 41% en 2023, lo que supone un aumento de casi cinco puntos.

"Se va a equiparar la presión fiscal a Europa en plena crisis", advierte el vicepresidente de la CEOE, Íñigo Fernández de Mesa.

La patronal no solo se muestra preocupada por el esfuerzo fiscal que se está pidiendo a empresas y ciudadanos para aumentar el gasto público en un contexto de alta inflación. También advierte del daño que hace a la inversión a medio plazo la decisión de subir el IRPF a las rentas altas, el Impuesto de Solidaridad o la nueva configuración en el Impuesto de Patrimonio.

[El Gobierno anuncia rebajas fiscales a rentas inferiores a 21.000 euros y un impuesto para fortunas de más de tres millones]

Según afirma, en algunas comunidades autónomas, la presión fiscal sobre determinados individuos podrá ascender al 65%, lo que puede provocar una "huida de talento" de España. Un país en el que regiones como Cataluña y Valencia ya figuraban entre los lugares con la fiscalidad más alta en la Unión Europea. 

Son datos que pueden lastrar la inversión en un momento en el que es necesario captar capital para conservar la recuperación económica. Uno de los motivos es que los directivos de muchas multinacionales tienen en cuenta estos parámetros a la hora de elegir el país para abrir sede.

En España, un ejecutivo estará sometido a una presión entre 10 y 15 puntos más elevada que en otros países europeos, según la organización de los empresarios.

"Para recaudar los 1.500 millones de euros que se quieren conseguir, aunque dudo que se logren, se genera una huida de talento", afirma Fernández de Mesa.

Impacto en el PIB

El impuesto a la Solidaridad planteado por el Gobierno puede tener un impacto negativo en el PIB de entre el 0,5 y el 2,5% en 2030 en función del tipo que finalmente se imponga y una incidencia sobre el stock de capital de entre el 1,25% y el 5,85%, según un informe de la consultora Freemarket Corporate Intelligence.

"Se trata de una tasa que actúa de manera negativa como un multiplicador desde el punto de vista del crecimiento económico y la creación de valor", advierte esta firma que preside el economista Lorenzo Bernaldo de Quirós.

Su diagnóstico coincide con el de la patronal al afirmar que provocará una "fuga de capital financiero y humano".

"La imposición patrimonial tiene un impacto sobre los incentivos de los individuos a ahorrar, trabajar e invertir que suelen ser ignorados por quienes defienden esa figura impositiva", explica el citado informe.

Así, "una fiscalidad progresiva sobre el Patrimonio, como la que recae sobre la renta, reduce la propensión de los individuos a asumir riesgos", añade.

En este sentido, recuerda la salida de capitales de Francia que provocó el impuesto que introdujo en 2002 el expresidente François Hollande y que fue derogado por Emmanuel Macron.

Y recuerda que el impuesto sobre las grandes fortunas grava activos que ya han pagado impuestos llegando a casos en los que se produce una triple imposición -al pagar Donaciones o Sucesiones-.

Déficit estructural

Las subidas fiscales a rentas altas y el incremento del impuesto sobre el Patrimonio, forma parte de las subidas de impuestos anunciadas en las últimas semanas por el Ejecutivo.

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2023 prevé alcanzar una recaudación récord en un año en el que se disparará el gasto.

Según datos del Instituto de Estudios Económicos, el próximo año los españoles pagarán en promedio 4.700 euros más en impuestos directos e indirectos que en 2018, año en el que Pedro Sánchez llegó a La Moncloa.

[Cada hogar pagará 4.700 euros más en impuestos en 2023 que antes del Gobierno Sánchez-Podemos]

Todo ello para financiar unas cuentas públicas expansivas en un momento de débil crecimiento. Unos Presupuestos que, según critican los empresarios, "no atajan el déficit estructural" que padece España a pesar de pedir un esfuerzo a los contribuyentes.

De hecho, recuerdan que el impacto en la recaudación de los impuestos a los 'ricos' es pequeño si se compara con los ingresos que está obteniendo el Estado por la mayor recaudación por IVA gracias al impacto de la inflación o por el IRPF.