Las protestas de la plantilla de Amazon de Dos Hermanas han cumplido ya un mes. Varios paros, unos parciales y otros de jornadas completas, además de concentraciones, se han sucedido en este tiempo, en el que se han desarrollado negociaciones que empiezan a encallarse: de las dos grandes demandas, subida salarial y mejora de las condiciones laborales, solo una muestra visos de convertirse en victoria para la plantilla.

Es la que tiene que ver con el convenio. Concretamente, con las compensaciones por los "incumplimientos" del texto que denuncia la plantilla en protesta, que tiene sus esperanzas en esta demanda, toda vez que la subida salarial parece innegociable.

"No quieren tocar el tema económico", apunta a este periódico Luis Miguel Manzano, presidente del comité y secretario general de UGT en Amazon. 

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Lo han constatado esta semana, en la última de las reuniones mantenidas con la empresa, que no se pronuncia sobre su contenido. "Estamos en negociaciones", resuelven desde Amazon a EL ESPAÑOL de Sevilla.

El salario, un asunto enquistado

La multinacional insiste: el salario de entrada es superior a los 1.400 euros al mes, "por encima del convenio colectivo" y ofrecen "otros beneficios", como seguro médico privado y fondos para formación. "Invertimos más de 3.000 euros por persona y año en beneficios adicionales", subrayan.

Es un extremo al que la plantilla pone peros. El problema no es el salario de entrada, que se ve complementado con pluses, arguyen: es que con el tiempo esos pluses desaparecen, y la subida de salario que trae el convenio conforme pasan los años no compensa esa desaparición.

Al final, remarcan, la nómina ingresada no aumenta. Es decir: lo que sienten es, en realidad, una merma salarial. 

Próximos pasos: el convenio

Sin avances en la vía del aumento salarial, la plantilla busca ahora avanzar en otro aspecto que le permita notar una mejoría: compensaciones por los "incumplimientos" del convenio que señalan.

Por ejemplo, en lo referido a la jornada reducida durante Semana Santa y Feria. En esos periodos, remarca Manzano, la jornada se extendería de 8.00 a 13.00 horas, pero acaban apareciendo turnos por la tarde. También aseguran que hay incumplimientos en lo referido a formación.

Lo que se busca ahora es fijar una cifra de esas compensaciones que satisfaga a todas las partes. Un objetivo que siguen viendo lejos, pero en el que están decididos a centrarse en próximas jornadas, en las que, por ahora, no prevén nuevos paros de jornada completa.

Adhesión a la huelga

En estas protestas, la adhesión a la huelga se concentra entre la plantilla fija, que asciende a 1.500 personas. El sindicato asegura que la mayoría la secunda, un extremo negado por Amazon, que fija en un 10% el seguimiento.

Este desfase de cifras es habitual desde que comenzó el conflicto en el centro de Dos Hermanas. Por parte del sindicato se sugiere que quizá la explicación resida en que la multinacional cuenta el grueso de empleados, en el que se incluye el personal de refuerzo por la Navidad y fijos discontinuos; algo más de 800 personas en total que no se han adherido a las protestas.