De nuevo Donald Trump. De nuevo en Twitter. Y de nuevo con la Reserva Federal (Fed) en su punto de mira. El presidente de EEUU no ha querido perder el margen de tiempo del que aún dispone para redoblar su presión sobre el banco central norteamericano, que este martes inicia una reunión de política monetaria que finalizará el miércoles con la primera rebaja de los tipos en la mayor economía del mundo desde 2008.

Pero con eso no basta. Trump quiere más. Mucho más, y ha soltado una secuencia de tuits en la que critica con dureza a la entidad presidida por Jerome Powell y la exige medidas contundentes.

"La Fed se ha equivocado en todos sus movimientos", denuncia Trump. Entre 2015 y 2018, la Fed elevó el precio del dinero del 0-0,25% al 2,25-2,50% aún vigente y desde octubre de 2017 ha recortado su balance en 700.000 millones de dólares, hasta los 3,8 billones. A su juicio, nada de esto fue correcto. Según Trump, el banco central "subió los tipos demasiado pronto y los llevó demasiado lejos", del mismo modo que la reducción del balance supuso "otro gran error", de ahí que ahora no se contente con poco. "Un pequeño recorte de los tipos no es suficiente", afirma.  

Pero por ahora es lo que se va a encontrar. Las previsiones apuntan a que la Fed abaratará este miércoles el precio del dinero un cuarto de punto, hasta el 2-2,25%. La duda reside en si Powell 'venderá' este recorte como una medida aislada o anticipa que vendrán más. Trump ya está presionando para que se imponga la segunda vía. 

El presidente de EEUU no oculta que su cruzada contra la Fed se encuadra dentro de las disputas comerciales con China, principalmente, y Europa. De hecho, lo que le pide a Powell es que responda con intensidad porque, según Trump, China y la Eurozona "bajarán más los tipos y bombearán más dinero en sus economías, con lo que sus empresas tendrán mucho más fácil vender". 

"Mientras tanto", lamenta, "y con una muy baja inflación, la Fed no hace nada y probablemente hará muy poco en comparación". "Muy mal", sentencia. 

Lo que más irrita -y preocupa- al presidente de EEUU es la posibilidad de que el dólar se aprecie más si la Fed es más tímida que sus colegas de la Eurozona o China. Actualmente, el euro se cambia a 1,114 dólares y el dólar se cruza a 6,89 yuanes chinos. 

Por este motivo, presiona en las horas previas al inicio de la reunión para ver si logra influir en la Fed. Aunque, dentro de esa guerra comercial y de divisas, se muestra convencido del triunfo de EEUU. "Ganaremos de todos modos", proclama.