El BCE, entre la desaceleración y la inflación: ¿bajada de tipos de 0,25 ó 0,5 puntos en diciembre?
- Las posibilidades de que el recorte sea de un cuarto de punto han crecido en los últimos días, en detrimento de un descenso mayor.
- Más información: El BCE advierte del "lento crecimiento" y "los elevados niveles de deuda" de la eurozona
La situación del Banco Central Europeo (BCE) es delicada. Mientras que parece que la inflación se resiste a disminuir hasta el objetivo de la institución —el 2%—, nubarrones cada vez más oscuros se ciñen sobre la economía del bloque del euro. Así, los responsables de política monetaria se enfrentan al dilema de bajar los tipos de interés 25 o 50 puntos básicos en su reunión de diciembre.
Según los datos publicados este viernes por la oficina de estadística comunitaria Eurostat, la tasa de inflación anual en la zona del euro repuntó tres décimas en noviembre, hasta el 2,3%.
La inflación subyacente —que excluye los precios de energía, alimentos, tabaco y alcohol por ser los más volátiles y que es la principal referencia para el BCE a la hora de fijar su política monetaria— se mantuvo por tercer mes consecutivo en el 2,7%.
En su próximo encuentro, que tendrá lugar el 12 de diciembre, los miembros del también supervisor bancario, podrán valorar el incremento que el Índice de Precios de Consumo (IPC) de Alemania registró en noviembre, de dos décimas al 2,2%; el de Francia, de una décima, al 1,3%; el de España, de seis décimas, al 2,4%, y el de Italia, de cinco décimas, al 1,4%.
A pesar de que el incremento de los precios se ha acelerado, las subidas registradas no han sido una sorpresa. Todas las previsiones iban en esa dirección. Por tanto, las perspectivas de que el BCE vaya a bajar los tipos de interés en su última reunión de 2024 siguen intactas.
El de diciembre será el cuarto descenso del precio del dinero que la institución dirigida por Christine Lagarde ejecute en este ciclo de recortes, que dio inicio en junio. Tras hacer una pausa en julio, volvió a reducir las tasas en septiembre y octubre.
Con la facilidad de depósito —el tipo de interés de referencia para el BCE y el mercado— en el 3,25%, la duda es si la próxima bajada será de 25 o de 50 puntos básicos.
Halcones y palomas
Algunos de los miembros del Consejo del BCE se han pronunciado públicamente a favor de mantener la velocidad en los 25 puntos básicos. Los denominados halcones, por estar a favor de una política monetaria más restrictiva, argumentan que los precios de los servicios siguen siendo demasiado elevados y que los salarios siguen creciendo con rapidez, mientras que el desempleo se mantiene en máximos.
Al mismo tiempo, otros banqueros centrales, los conocidos como palomas y quienes están más cómodos con los tipos de interés en niveles más reducidos, defienden la necesidad de una mayor normalización de la política monetaria debido a la debilidad de la economía de la eurozona.
Consideran, además, necesario un mayor recorte de los tipos de interés como método de protección del empleo, ya que el aumento del paro frenaría una demanda ya de por sí débil, lo que generaría un círculo vicioso en el que más paro generaría menos consumo y viceversa.
Uno de esos miembros es el gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, quien este jueves dio por garantizada la bajada de los tipos de diciembre y manifestó la conveniencia de no descartar ninguna opción sobre la velocidad ni cuantía de las rebajas futuras.
En el otro lado del ring dialéctico se ha situado Isabel Schnabel, consejera del BCE y reconocida halcón, quien ha pedido más cautela a la hora de bajar los tipos de interés. "Los mercados parecen asumir que necesitaremos movernos hacia un territorio acomodaticio. Desde la perspectiva actual, no creo que eso sea apropiado", señaló en una entrevista en Bloomberg.
Aunque este debate no se resolverá hasta que los miembros del BCE se encuentren en Fráncfort en once días, el mercado intenta anticiparse al desenlace.
25 o 50 puntos básicos
Las previsiones han cambiado bruscamente esta semana. Así, el pasado lunes el mercado estaba dividido prácticamente al 50% entre una bajada de 25 y de 50 puntos básicos. Ahora, según los datos de LSEG, las probabilidades de que el descenso sea de un cuarto de punto se han elevado por encima del 76%.
A pesar de que los inversores se decantan por una bajada de 25 puntos básicos en diciembre, las apuestas por una mayor relajación de la política monetaria se han incrementado.
Ahora esperan un recorte de las tasas de referencia en cada una de las reuniones que el BCE celebrará hasta junio y que la facilidad de depósito se sitúe en el 1,75% a finales de 2025.