El presidente de la Fundación Bancaria La Caixa, Isidre Fainé, ha insistido en la importancia que tienen los dividendos empresariales, sobre todo los de las entidades financieras, ya que en muchos casos responden a una labor social. Por ejemplo, en el caso de los jubilados que los tienen como un "complemento" a su pensión. 

También para entidades como la que preside, las fundaciones de las antiguas cajas de ahorro ahora reconvertidas en entidades financieras y que emplean el dinero del dividendo en ayuda a los demás.

"Para poder hacer obra social hay que ganar el dinero, por eso no estoy de acuerdo con la política de no pagar dividendos", ha dicho Fainé en la Cumbre Empresarial organizada por la CEOE.

Reinvertir el dinero

Ha insistido en que "nosotros reinvertimos el dinero", y por eso dice no entender que ahora se impida la distribución del dividendo en según que entidades.

Durante su alocución en la jornada dedicada a la Responsabilidad Social Corporativa, Fainé ha destacado el papel de la Fundación Bancaria La Caixa en la ayuda a los demás, y ha recordado que eso es algo que va en el "ADN" de las antiguas cajas de ahorro. 

Para muestra un botón: las fundación de las antiguas cajas han destinado 840 millones durante el último año a proyectos sociales llegando a más de 35 millones de beneficiarios. 

Es por ello por lo que ha insistido en la importancia que tiene que todas las empresas tengan en cuenta cuatro grupos de interés en la empresa. La empresa, para que sean felices y logren clientes que estén contentos, lo que ayudará a los accionistas y, por último, a la sociedad. 

Conexión personal 

Por último, Fainé ha destacado que no está "en contra de las nuevas tecnologías, pero siempre digo que es importante la conexión personal con el cliente. Insisto en que los bancos y las cajas no podemos deshumanizarnos".

También ha insistido en la importancia de reducir la desigualdad entre hombres y mujeres y ha recordado que es vital para las empresas y los gobiernos apostar por la colaboración público-privada. 

En una línea similar se ha pronunciado también Fátima Báñez, miembro del patronato de la Fundación CEOE quien ha indicado que la "RSC es compromiso". Por eso ha insistido en la importancia que tiene que en la recuperación todas las empresas trabajen bajo la idea de que "deben crear riqueza desde la igualdad de oportunidades". 

La que fuera ministra de Empleo ha recordado que la RSC es también "un elemento de competitividad y sostenibilidad", por lo que debe emplearse para lograr que se convierta en un elemento de "competitividad". 

El compromiso empresarial

Ha recordado que en 2014 tuvo ocasión de impulsar la primera estrategia de RSC con el acuerdo de los agentes sociales y la sociedad civil. 

Báñez, por último, ha insistido en que las empresas "han sido capaces de dar respuesta, transformar sus cadenas de producción y tener un compromiso con la comunidad dando muestra de que son instituciones con compromiso social" durante la pandemia.

Una referencia a todas aquellas compañías que han importado material sanitario, que han transformado sus cadenas de producción, etc. 

En esta quinta jornada de la Cumbre Empresarial CEOE también ha participado el presidente de la ONCE, Miguel Carballeda, quien ha insistido en el reconocimiento a los empresarios y ha recordado que "el paro se soluciona con empleo y eso lo crean los empresarios".

También ha pedido que nos atrevamos a hacer de España el país "más accesible del mundo", máxime ante el envejecimiento de la población que se avecina para "cuidar a nuestra gente mayor" porque se "lo debemos".