El Gobierno de Mariano Rajoy sube el tono en público contra el presidente del Eurogrupo, el socialista holandés Jeroen Dijsselbloem, aunque todavía no pide abiertamente su dimisión, como sí han hecho desde Portugal o Italia. El ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, ha dicho este jueves que Dijsselbloem debería pedir disculpas por haber acusado a los países del sur de gastarse el dinero en "copas y mujeres". Si no rectifica, ha apuntado, quedará incapacitado para seguir en el cargo porque ya no puede ejercer de mediador en el Eurogrupo.

"El señor Dijsselbloem, como su partido, está en una situación difícil que supongo que hace posible que uno pierda los nervios y diga cosas no convenientes", ha dicho Dastis a la prensa tras reunirse en Bruselas con el negociador de la UE para el brexit, Michel Barnier. Los socialdemócratas del PvdA se han desplomado en las elecciones holandesas y Dijsselbloem dejará de ser ministro de Finanzas en la nueva coalición del liberal Mark Rutte.

"Si yo fuera el señor Dijsselbloem, yo me excusaría. Si el señor Dijsselbloem no se excusa es porque cree lo que dijo y eso a mi me parece que reflejaría una catadura moral que no sé si es compatible con una función que pide aunar voluntades, lograr consensos, en lugar de resaltar diferencias que no son más que estereotipos", ha subrayado el ministro de Exteriores.

Al ser preguntado por si las aclaraciones que hizo Dijsselbloem este miércoles le parecen insuficientes, Dastis ha señalado que no las conocía. El jefe del Eurogrupo no se disculpó expresamente, sino que dijo que sus palabras habían sido malinterpretadas y lamentó que los países del sur se sintieran aludidos. Además, dejó claro que no tiene intención de dimitir.

Palabras racistas y contra las mujeres

El jefe de la diplomacia española ha eludido pronunciarse sobre si el sustituto de Dijsselbloem debería ser el ministro de Economía, Luis de Guindos. "Eso ya lo veremos. Ese puente lo cruzaremos cuando lleguemos", ha apuntado Dastis.

Por su parte, el grupo socialista en la Eurocámara, al que pertenece el partido de Dijsselbloem, sí ha pedido abiertamente su dimisión como jefe del Eurogrupo. Su jefe, el italiano Gianni Pittella, cree que las declaraciones del holandés son "vergonzosas". "Estábamos esperando unas excusas que no han llegado. Esto confirma que no es apto para el cargo: el Eurogrupo merece un nuevo presidente progresista", ha dicho Pittella.

También el presidente de la Eurocámara, el conservador Antonio Tajani, ha arremetido contra Dijsselbloem, aunque ha evitado pedir su dimisión alegando que carece de competencias para ello. "Son palabras inaceptables para nosotros: frases racistas, en contra de las mujeres", ha dicho en una entrevista en Onda Cero. "Afortunadamente, ese señor no es el jefe de toda Europa", ha apuntado.