La segunda ola del coronavirus atraviesa la geografía española desde hace meses, provocando que los ejecutivos autonómicos estén teniendo que tomar medidas para limitar la movilidad social y frenar su avance. Medidas que impactan en las empresas, puesto que atenúan su actividad, perjudican su economía y ponen en un brete su supervivencia.
Por ello el Gobierno está preparando un nuevo ‘salvavidas’ para las empresas. Se trata de un real decreto-ley (RDL) que se aprobará el próximo martes y que incluirá varias medidas para prorrogar medidas que ya están en marcha y al que se sumarán otras nuevas que se están ultimando.
Entre ellas está el retrasar la devolución de los créditos que avaló el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y que el Gobierno habilitó para facilitar la liquidez de las empresas y los autónomos durante el estado de alarma.
Se trata de unos créditos (100.000 millones en total) que se tendrían que empezar a devolver en marzo del próximo año, algo que cada vez parece más inviable. El impacto de la segunda ola y los nuevos confinamientos está provocando que se retrase la eventual recuperación de las cuentas de multitud de negocios
De hecho, esta medida es una petición del propio sector financiero. Como ya contó este periódico, hay un nerviosismo en la banca ante la evidencia de que si los impagos llegan, tendrán que empezar a ejecutar los préstamos.
Sin embargo, el aplazamiento de la devolución de los créditos del ICO todavía no se puede dar por cerrado. Tomar esta medida requiere de un cambio normativo que todavía no habría sido autorizado por la Comisión Europea. El Gobierno está a la espera de recibir el permiso de Bruselas para poder ejecutarla.
El futuro RDL abordará también medidas para ‘rescatar’ sectores. En este sentido, se esperan iniciativas destinadas, particularmente, para los ámbitos empresariales que más están sufriendo la segunda ola del coronavirus.
Hostelería
Todos los dedos señalan al sector de la hostelería. Los bares y los restaurantes, así como el turismo, son los que más están sufriendo los efectos de los confinamientos, que han provocado cierres generalizados de los establecimientos.
A cierre de esta información todavía no ha quedado claro qué fórmula se va a aplicar para esto. Se manejan varias opciones, entre ellas aplicar exoneraciones de las cotizaciones (que irían aparte de las incluidas en los ERTE) o incluso ayudas directas, tal y como ya ha aprobado Andalucía. También se plantean nuevas moratorias y aplazamientos en el pago de impuestos a la Agencia Tributaria.
Todas estas medidas se están ultimando de cara a ser incluidas en un RDL ómbinus que el Consejo de Ministros aprobará el martes. El texto incluirá también la esperada bajada del IVA de las mascarillas, que pasará del 21% al 4%.
Según el Ministerio de Sanidad, esto provocará una nueva reducción del precio máximo de las mascarillas, que a partir de la próxima semana será de 72 céntimos.