La deuda valenciana rebasa por primera vez los 50.000 millones y roza ya el 50% del PIB, la mayor tasa de España
La autonomía registra los incrementos más bruscos de la pandemia: pasa de 48.440 a 50.807 millones y del 41,8% al 48,6% del PIB en solo un año.
31 marzo, 2021 12:55Noticias relacionadas
La pandemia agranda el grave problema de endeudamiento de la Comunidad Valenciana, que recurre a la deuda pública ante la infrafinanciación que padece por parte del Estado. Tal y como vaticinó durante la primera ola el propio presidente autonómico, Ximo Puig, la región rebasó en 2020 los 50.000 millones de deuda por primera vez en su historia.
Así lo acreditaron este miércoles las cifras oficiales del Banco de España, que corresponden al cuarto trimestre del año pasado. La deuda de la región ascendió a un total de 50.807 millones de euros y ya representa el 48,6% del Producto Interior Bruto de la autonomía.
El dato absoluto sitúa la deuda de la comunidad como la segunda más elevada del país en términos reales, solo por detrás de los 79.119 millones de euros que debe Cataluña -con una población muy superior-.
Pero, en términos relativos, el endeudamiento valenciano encabeza el ranking nacional. Supera ampliamente el de Castilla-La Mancha, que se encuentra en segunda posición con el 39,7% del PIB; o el de la propia Cataluña, que se sitúa en el 37,1% de la riqueza autonómica.
La comparativa respecto al cierre del ejercicio 2019 también arroja una evolución preocupante. La Comunidad Valenciana ha pasado de 48.440 millones de deuda a un total de 50.807- El crecimiento es del 4,9% y 2.367 millones más en solo un año. Se trata también del mayor incremento de todo el país en términos absolutos.
Y lo mismo ocurre en términos relativos. El endeudamiento valenciano respecto al PIB era del 41,8% al cierre de 2019, de modo que el crecimiento ha sido de 6,8 puntos hasta alcanzar el 48,6% el pasado ejercicio, lo que supone el mayor crecimiento regional del endeudamiento.
¿Y por qué ha crecido tanto el endeudamiento valenciano? El conseller de Hacienda de la autonomía, Vicent Soler, indicó este miércoles que "responde prácticamente en su totalidad a los recursos recibidos a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) en el año 2020".
"En concreto, a la financiación del objetivo de déficit del año 2020 (205 millones de euros), al extra FLA correspondiente a la desviación del déficit del año 2019 (2.127 millones de euros), a disposiciones pendientes del FLA 2019 (1 millón de euros), así como a la financiación de las liquidaciones negativas del sistema de financiación (91 millones de euros)", desglosó su departamento.
Soler subrayó que la Comunidad Valenciana "no tiene un problema de endeudamiento por un exceso descontrolado de nuestro gasto, sino por una falta evidente de recursos por una infrafinanciación que cada vez lastra más nuestras cuentas".
La Comunidad Valenciana recurre más a estos préstamos del Estado al ser la peor financiada de toda España con el actual sistema de reparto, tal y como reconoce el propio Ejecutivo. El modelo distributivo está caducado desde 2014, pero el Gobierno de España posterga su renovación año tras año.
Ingresos ficticios
"El nuevo modelo debe cumplir dos principios básicos, el de la suficiencia de recursos, que este año se ha aumentado de forma global para el conjunto de España gracias a las aportaciones del Gobierno central; pero también el de la equidad en el reparto de recursos, que sigue sin solucionarse", reclamó el responsable de Hacienda.
Cabe reseñar además que la Generalitat Valenciana, desde el ejercicio 2016, gasta como si estuviera bien financiada. Lo hace con la introducción en sus presupuestos de una "partida reivindicativa" de ingresos por alrededor de 1.300 millones de euros. Como nunca llegan esos millones, tales ingresos inexistentes se trasforman año tras año en deuda y agravan el endeudamiento autonómico.
"Si tomamos como punto de partida el modelo de financiación de 2002, la infrafinanciación que sufre la Comunitat Valenciana explica el 46% de nuestra actual deuda", aseguró este miércoles Soler, que reivindicó además la necesidad de que el Estado "articule algún mecanismo que compense la deuda histórica valenciana vinculada a la infrafinanciación".