Ayuso libera a los madrileños de los impuestos propios: los catalanes pagan 677 millones
Hasta ahora los madrileños pagaban 3,4 millones de euros por estos impuestos, el montante más bajo en toda España.
2 septiembre, 2021 02:11Noticias relacionadas
Isabel Díaz Ayuso anunció este miércoles que eliminará todos los impuestos propios con los que contaba hasta ahora la Comunidad de Madrid. Esto supone que los madrileños se ahorrarán 3,4 millones de euros al año según los datos de la propia autonomía.
Los impuestos propios son los tributos que cada región crea para sí misma y que recauda entre sus ciudadanos, sin tener que compartirlos con el resto de regiones o administraciones.
Madrid, hasta ahora la comunidad autónoma con el menor número de estos tributos y la que menos recaudaba por este concepto, se convierte también en la primera dejar esta vía de ingresos en cero euros.
De esta manera, se eliminarán el impuesto sobre la instalación de máquinas recreativas en establecimientos de hostelería autorizados, el impuesto sobre el depósito de residuos y el recargo en el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE).
Entre todos ellos la comunidad recaudó 3,4 millones de euros en 2020, según datos de la Administración de Isabel Díaz Ayuso, y 6,9 millones en 2019 según las cifras homologadas por el Consejo General de Economistas de España en su informe Panorama de Fiscalidad Autonómica y Foral 2021.
Este anuncio de Ayuso ahonda aún más la brecha fiscal con el resto de autonomías. En este caso, Cataluña tiene trece impuestos propios, cinco cánones y un gravamen, con los ingresó en 2019 (el último año con datos homologados) 677,5 millones de euros frente a los 6,9 millones de Madrid.
Ahora, con el cambio de Ayuso la aportación de los madrileños se va a cero frente a los casi 700 millones que anualmente pagan los catalanes en materia de tributos exclusivamente regionales.
En el caso catalán existen impuestos tan específicos como el que grava a los grandes establecimientos comerciales, las estancias en establecimientos turísticos, los depósitos en las entidades de crédito (declarado inconstitucional), la emisión de gases y partículas a la atmósfera producida por la industria y la producción de energía eléctrica de origen nuclear (también declarado inconstitucional).
También tienen un impuesto sobre las bebidas azucaradas envasadas, sobre las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos de tracción mecánica, sobre los activos no productivos de las personas jurídicas y sobre instalaciones que inciden en el medio ambiente.
Canarias y Valencia
En cuanto a cánones, prácticamente ningún ámbito se salva. Se cobra un canon del agua, sobre la deposición controlada de residuos municipales, sobre la deposición controlada de residuos industriales, sobre la deposición controlada de residuos de la construcción y sobre la incineración de residuos municipales.
La tercera autonomía con los mayores impuestos propios es Canarias, según el informe del Consejo General de Economistas, con una recaudación en 2019 de 497,9 millones de euros y cinco impuestos. Le sigue Comunidad Valenciana, cuyos ciudadanos pagaron este año 298,3 millones en cinco impuestos diferentes, mientras que Baleares le siguió con unos ingresos de 216,8 millones y cuatro impuestos.
Cierran la lista de las autonomías que ingresan por encima de los 100 millones por impuestos propios Andalucía con 146,1 millones (ocho impuestos) y Extremadura con 118 millones y cinco impuestos. Entre los impuestos propios que son comunes en casi todas las autonomías encontramos los impuestos sobre el agua, sobre emisión de gases o sobre los residuos.
En este informe se refleja además que desde 2018 hasta 2019 el total de autonomías de régimen común han aumentado sus ingresos tributarios en un 2,8%, abarcando esta cifra tanto a los impuestos propios como los impuestos cedidos (Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados e Impuesto sobre el Patrimonio) y las tasas.
Del mismo modo, los impuestos propios aumentaron su recaudación un 2,7% en 2019 con respecto a los ingresos obtenidos en 2018 –prácticamente lo mismo que los ingresos tributarios–, con oscilaciones importantes en las distintas autonomías hasta un total de 2.428 millones de euros.
Bajada de impuestos de Madrid
El fin de los impuestos propios es un nuevo paso de Isabel Díaz Ayuso para reducir los impuestos de los madrileños. La presidenta de Madrid ya anunció el pasado mes de junio que va a bajar medio punto porcentual el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en todos los tramos, que supondrá unos 300 millones menos de recaudación.
Ayuso lleva años defendiendo que la mejor manera de impulsar el crecimiento económico es la bajada de impuestos a personas y empresas, lo que le ha llevado a enfrentarse al Gobierno central que la acusa de 'dumping fiscal' perjudicando la recaudación de otras autonomías, según dice el Ejecutivo.
Lo cierto es que, pese a estas críticas los datos indican que Madrid es la autonomía más solidaria y la que más aporta al Fondo Estatal de Garantía de Servicios Públicos Fundamentales (FGSPF).
La 'caja común' que sirve para financiar los servicios básicos del resto autonomías de régimen común recibe el 68% de sus recursos de Madrid (4.039 millones en 2019), muy por encima de lo que aportan Cataluña (25%) o Baleares (6,5%).
De hecho, según datos de la Comunidad de Madrid y del Ministerio de Hacienda, Madrid aporta a la 'caja común' 23.000 millones más que Cataluña desde 2009.
Inicio de curso
Parece que la presidenta de la Comunidad de Madrid ha regresado de las vacaciones estivales con una hoja de ruta bien definida que podría resumirse en menos impuestos, más natalidad y la difícil tarea de vender la utilidad de la Oficina del Español que dirige Toni Cantó.
Más allá de las rebajas de impuestos, otra de las prioridades del Ejecutivo regional será la de promover la natalidad mediante ayudas de 14.500 euros por hijo para las madres menores de 30 años que lleven más de una década empadronadas en la Comunidad de Madrid. Todo un cheque bebé que Ayuso ya presentó en su discurso de investidura.
uentes populares aseguran que la "protección de la maternidad" es una de las prioridades de Díaz Ayuso en la XII legislatura. Y por eso otorgará 500 euros a cada mujer desde el quinto mes de embarazo hasta que el niño cumpla dos años. La ayuda, además, será compatible con el puesto de trabajo de las beneficiarias siempre y cuando éstas cobren menos de 30.000 euros al año.
La partida estimada para que las mujeres puedan optar por la gestación independientemente de su situación económica es de 250 millones de euros al año. A ella podrán acceder hasta 14.000 madres, según los cálculos del Ejecutivo regional.
Además, las mujeres embarazadas de hasta 35 años tendrán prioridad en la presentación de solicitudes de alquiler de vivienda dentro del Plan Vive, y todas las madres de la región que estén en desempleo, independientemente de su edad, podrán participar en bolsas de trabajo específicas adaptadas a sus necesidades y en planes de formación con soporte educativo en caso de que quieran completar sus estudios.
Oficina del Español
Otro de los retos de este nuevo curso político será encontrar una función específica, concreta, a la Oficina del Español creada el pasado mes de junio y dirigida por Toni Cantó.
La maniobra ha sido una de las más criticadas al Gobierno de Ayuso, por cuanto fue entendida como una manera de acomodar al exdirigente de Ciudadanos después de que el Tribunal Constitucional lo expulsara de la lista electoral del PP para los comicios del pasado mes de mayo.
En su día, la Oficina del Español fue publicitada como una manera de promover el idioma, pero dos meses después de su creación no ha registrado actividad alguna pese a que Cantó -en su condición de director del área- cobra 75.084 euros al año. Una circunstancia que ha provocado que la oposición tilde la iniciativa de "chiringuito".
De la Oficina sólo se conocen sus supuestos fines, que son la "promoción de la Comunidad de Madrid como capital europea del español, interlocución con instituciones para impulsar las oportunidades económicas del español y la colaboración activa con entidades dentro del ámbito de la Comunidad de Madrid que trabajan por el impulso del español".
Y la presidencia
Y otro reto, aunque éste de carácter más personal, es el que Díaz Ayuso afronta ahora que ha oficializado su candidatura a la presidencia del PP madrileño. Una decisión con la que pretende erigirse en líder total de la región -al modo en que lo es Juanma Moreno en Andalucía- tras el congreso que se celebrará en el primer semestre de 2022.
Aunque aún no se conoce su rival, todo apunta a que éste no será el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. El también portavoz nacional del PP ha descartado en reiteradas ocasiones su candidatura, abogando por una tercera vía en la que este cargo no fuese ostentado ni por la presidenta ni por el regidor de la capital, sino por un tercero. O tercera, pues Ana Camins, actual secretaria general del PP de Madrid, figuraba en todas las quinielas.
Fuentes cercanas al alcalde han asegurado a este medio que Ayuso sería "una extraordinaria presidenta", alejando de nuevo la posibilidad de que Almeida se presente al congreso que renovará el liderazgo madrileño tras tres años de interinidad en la región, pues el PP está dirigido por una especie de gestora elegida por la dirección nacional desde que Cristina Cifuentes abadonara el cargo en 2018.