Dos trabajadores a la entrada de la planta de Ford, en Almufasses.
El Gobierno busca opciones que permitan a Ford rebajar el impacto del ERE de 1.622 personas en Almussafes
Desde el Ejecutivo aseguran que manejan varios instrumentos, aunque rebajan las expectativas para un posible mecanismo Red.
15 junio, 2024 03:07Ford ha puesto sobre la mesa un expediente de regulación de empleo (ERE) de 1.622 personas en su fábrica de Almussafes, en Valencia. un tercio de la actual plantilla de la planta. Según ha podido saber EL ESPAÑOL-Invertia, el Gobierno baraja ya varias posibilidades para tratar de atenuar el impacto de este despido colectivo.
Fuentes de varios ministerios confirman a este periódico que se está analizando la situación para abordar una fórmula que permita rebajar la cifra de salidas, o al menos, mejorar las condiciones de los afectados.
De las 1.622 plazas afectadas por el despido colectivo, 626 corresponderían a bajas incentivadas con carácter definitivo y 996 a despidos objetivos con preferencia de recontratación en 2027.
Hay varios departamentos del Estado trabajando en las posibles opciones para abordar esta situación, cuya actividad se concentraría en el Ministerio de Industria.
Con todo, estas mismas fuentes recuerdan que Ford podría recurrir a otras opciones que no fuera la extinción masiva de empleo. Ponen como ejemplo los expedientes de regulación de empleo temporales (ERTE) por causas económicas, técnicas, organizativas y productivas. Es decir, los ERTE ETOP.
Factoría de Ford Almussafes.
"Ford está comprometido con trabajar constructivamente con la Representación Legal de los Trabajadores y los gobiernos nacional y regional para encontrar todas las oportunidades posibles para reducir el impacto en los empleados de Ford, sus familias y la comunidad local", ha manifestado respecto a la situación la firma del óvalo.
UGT, en la misma línea, ha abogado por "arbitrar soluciones transitorias viables", que cuenten con "el apoyo de las administraciones".
El sindicato considera que la solución pasa por poner en marcha un mecanismo RED. La propia Generalitat de Comunidad Valenciana presidida por Carlos Mazón ha puesto esta alternativa sobre la mesa.
"Le pido al Gobierno de España que asuma su responsabilidad, que ponga en marcha el mecanismo RED, que me consta que lo está estudiando y quiero hablar en positivo. No quiero devolverle al Gobierno la pelota, yo sí que quiero hacer política de Estado con esto", indicó Mazón este viernes.
Mecanismo RED
El mecanismo RED es un instrumento excepcional que debe ser aprobado por el Consejo de Ministros. Ya fue habilitado para auxiliar al sector de las agencias de viaje durante la pandemia.
Es una suerte de ERTE con ventajas para empresa y empleados, como el ahorro en cotizaciones y el pago de prestaciones, respectivamente.
Tiene dos modalidades. La primera es la cíclica, que busca proporcionar a las empresas un marco estable ante una caída transitoria o cíclica de su demanda por causas macroeconómicas. El objetivo es evitar despidos masivos inmediatos.
La segunda modalidad es la sectorial. Con ella, las organizaciones sindicales y empresariales más representativas podrán solicitar el Mecanismo Red. Está planteada para facilitar cambios estructurales en sectores que lo necesiten.
Adaptación
Sin embargo, no parece que ninguna de las modalidades se adapte al caso de Ford. De hecho, fuentes del Gobierno lo ven así y consideran que el Mecanismo RED no es, ni de lejos, la fórmula adecuada para atenuar el despido colectivo de Almussafes.
De hecho, desde el Ejecutivo afirman que todavía no han recibido petición alguna (ya sea de Ford, de la patronal valenciana o de UGT) para activar esta suerte de ERTE.
Se trata del cuarto ERE que sufre la planta de Almussafes en cinco años. Tras sufrir tres de 350, 600 y 950 salidas, este año llegaría el mayor para elevar los despidos a 3.522 en solo un lustro.
Se trata de más de la mitad de los empleados que la multinacional tenía en Almussafes en 2020, cuando aglutinaba a 6.700 trabajadores. Tras el despido colectivo anunciado, se quedaría en menos de 3.200.
El adelgazamiento acelerado del motor industrial de la provincia de Valencia, compuesto por Ford y su industria auxiliar, ha hecho saltar las alarmas en la autonomía.
UGT fue la primera voz que reclamó la intervención del Gobierno para frenar la destrucción de empleo. Después se unió CCOO.
Su principal argumento es que la crisis actual de Ford, en buena medida, responde a un valle productivo temporal. La compañía ha anunciado la adjudicación de un nuevo coche híbrido para generar un volumen productivo de 300.000 vehículos y 300.000 motores, cifras muy superiores a las actuales. Pero esta carga de trabajo no se espera hasta 2027.
