Iberdrola pujará por construir el proyecto eólico marino de Dunkerque (Francia), que contará con una capacidad de entre 250 y 750 megavatios (MW), y al que aspiran también un consorcio integrado por Engie y EDP Renováveis (EDPR), informaron a Europa Press en fuentes de la compañía.
La energética buscará así su segundo proyecto eólico 'offshore' en aguas francesas, donde está ya desarrollando el parque eólico de Saint Brieuc, de 496 MW y cuya entrada en operación está prevista para 2022.
Iberdrola ha dado el primer paso para optar al proyecto al presentarse a la precalificación, cuya fecha límite para acudir se cerró este 6 de marzo, aunque las mismas fuentes indicaron que la selección se encuentra en sus primeras fases y aún "no hay ninguna decisión en firme tomada" respecto a sus aspiraciones finales.
El grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán competirá por este proyecto eólico en aguas galas, cuya entrada en operación está prevista para 2022, con el consorcio integrado por Engie y EDP Renováveis.
Ambas compañías han trabajado anteriormente en proyectos de estas características en Dieppe-Le Tréport (500 MW) y en las Islas de Yeu y Noirmoutier (500 MW), así como en proyectos de energía eólica marina flotante, con el parque eólico piloto de Leucate en el Mediterráneo (24 MW) y en calidad de socios en el proyecto WindFloat Atlantic en Portugal (25 MW), informaron en un comunicado conjunto las dos sociedades.
La eólica marina
Iberdrola es un referente mundial en eólica marina, donde ya cuenta con diversos proyectos, tanto en curso como en desarrollo. Así, en 2014 puso en marcha West of Duddon Sands (Reino Unido), el primer parque eólico 'offshore' del grupo.
En aguas del Reino Unido, también está construyendo el parque East Anglia One, con una capacidad de 714 MW y cuya puesta en marcha está prevista para 2019.
Además, esta desarrollando el parque Wikinger, en aguas alemanas del mar Báltico y con una potencia de 350 MW, que se prevé que entre en funcionamiento el próximo año.
Este proyecto de Dunkerque se trata de la tercera licitación de energía eólica marina en el país, después de que Francia se lanzara a este tipo de proyectos con la adjudicación en 2012 de 2.000 MW, entre los que figuraba el proyecto de Iberdrola de Saint-Brieuc (Bretaña).
La segunda licitación del país galo, por 1.000 MW, se adjudicó en 2014, con un consorcio integrado por Engie, EDP Renováveis, Neoen y Areva como vencedores.