La asamblea se ha reunido hoy para analizar la última propuesta de la empresa, que planteó ayer mantener a 160 trabajadores, lo que implica 167 despidos, con una reducción salarial del 10 % y cerrando la planta productiva de Garagartza, la emblemática fábrica que acogió a Fagor Electrodomésticos.

La dirección comunicó que este viernes presentará un ERE de extinción para toda la plantilla, del que se podrían "desafectar" 160 trabajadores en el caso de que la asamblea aceptara su nuevo plan.

Los empleados han opinado, en un comunicado, que la intención de la empresa consiste en comercializar productos fabricados fuera bajo la marca de Fagor, para lo que creen que CNA "ya ha llegado a un acuerdo con una gran multinacional".

La asamblea ha explicado, en un comunicado, que CNA quiere "hacer uso de la marca Fagor", para lo que necesitan que la propietaria de la marca, Fagor S.Coop -perteneciente a la Corporación Mondragón- "renegocie el acuerdo que tiene, aceptando que se dé empleo a menos personas".

"Hemos aceptado que se vuelquen en la comercialización, pero a cambio de que presenten un proyecto de fabricación complementario y como respuesta ni siquiera se han dignado a presentar un plan industrial en el que se puedan fabricar los productos de mayor valor añadido que se pueden producir aquí: hornos y placas", han lamentado.

Los trabajadores han acusado a la empresa de pretender que acepten "a ciegas" 167 despidos para obtener "un cheque en blanco que le permita pegar un pelotazo comercializando con la marca Fagor y haciendo desaparecer progresivamente la fabricación".

"Si alguien duda de las verdaderas intenciones de la dirección no hay más que ver su apuesta por los jóvenes: plantean que todas las personas mayores de 50 años se queden trabajando", han añadido.

La asamblea asegura que la empresa ha reiterado su "posición política de no fabricar en Garagartza" pero no ha comunicado "dónde quiere fabricar, o mejor dicho, realizar el montaje".

Han revelado, además, que cuando se preguntó a la dirección sobre si había posibilidad de renegociar las condiciones del alquiler de la planta, CNA aseguró que había decidido "salir de Garagartza" porque, de lo contrario, "la multinacional no entra".

Los empleados han emplazado al Gobierno Vasco y a Fagor S.Coop, propietario de la marca, a que manifiesten su opinión sobre el proyecto de CNA.

"Sabemos que quieren paz social y nosotros también. Pero eso pasa por transparencia, información y apuesta por un futuro industrial junto a la comercialización. Seguiremos peleando para que así sea", concluyen los trabajadores.