Airbus refuerza su presencia en China con una nueva planta de acabado

Por Jèssica Martorell

Se trata de la primera planta de estas características que la compañía abre fuera de Europa, lo que evidencia que China se ha convertido en un elemento clave para su negocio global, ya que todas las previsiones apuntan a que muy pronto se convertirá en el líder mundial en tráfico aéreo de pasajeros.

El presidente de aviones comerciales de Airbus, Fabrice Brégier, remarcó durante la inauguración de la planta en Tianjin (noreste) que este nuevo proyecto supone un "nuevo hito" para la compañía y muestra "el compromiso mutuo con un fuerte y creciente sector chino de la aviación".

El centro, con una inversión total de unos 166 millones de euros, realizó este miércoles su primera entrega simbólica para la compañía china Tianjin Airlines, aunque la aeronave fue acabada en la planta de la compañía en Toulouse (Francia).

Al acto de inauguración asistieron representantes de las autoridades chinas y francesas, entre ellos el secretario francés de Economía, Benjamin Griboux, que insistieron en la importancia de este acuerdo para consolidar el fuerte progreso logrado en el mercado chino de la aviación.

"China es un país ideal para operar", destacó Brégier, que reconoció que el gigante asiático ya es una parte crucial para el suministro y la cadena de producción de la compañía.

Las nuevas instalaciones, que estarán preparadas para entregar dos aeronaves al mes a partir de principios de 2019, se encuentran junto a la factoría de ensamblaje de aparatos de pasillo único (modelos A319 y A320) en Tianjin, que empezó a funcionar en 2008.

Esta planta recibirá los aviones A330, con capacidad de entre 200 y 400 pasajeros, de la factoría de Toulouse, donde se fabrican, para realizar el acabado de los aviones.

Entre 250 y 300 trabajadores se encargarán de incorporar los equipos de vídeo, aire acondicionado, revestimiento de carga y de puertas, paneles del techo, asientos, cortinas, material de seguridad, etiquetas y cocinas.

El responsable de las plantas de Airbus en Tianjin, Andrea Ockel, explicó que un total de 150 trabajadores chinos han sido formados en Europa para desarrollar estas labores de acabado de la familia A330, que cuentan con una capacidad de entre 200 y 440 pasajeros.

Airbus es el fabricante de un total de 1.480 aparatos de la flota activa de aeronaves en China, donde la familia A330 es uno de los modelos de cabina ancha más populares, con nueve compañías que ya los utilizan.

Según destacó el presidente de aviones comerciales de Airbus China, Eric Chen, el país asiático ofrece un "mercado enorme", ya que el Gobierno pretende aumentar el número de aeronaves de los 3.000 actuales a 4.500 en 2020, cuando está previsto que el tráfico aéreo alcance los 720 millones de pasajeros.

China está a punto de convertirse en el líder mundial en tráfico aéreo de pasajeros debido a su rápido crecimiento, que se prevé del 6,9 % anual a lo largo de los próximos 20 años, un ritmo superior al 4,6 % previsto para todo el mundo.

La presencia de Airbus en China comenzó en 1985 con su primera entrega de un A310 a la aerolínea China Eastern Airlines, y desde entonces el mercado del fabricante aeronáutico ha experimentado un importante crecimiento de sus operaciones.

Uno de sus objetivos es la cooperación con la industria aeronáutica china, por lo que también busca el desarrollo de habilidades de ingeniería e innovación tecnológica y promover la integración de suplementos chinos en la cadena de suministros global de Airbus.

Desde 2011, Airbus también cuenta con una fábrica para la producción de componentes para nuevos modelos en Harbin (noreste), que tuvo participación española en los procesos de formación, producción, control de calidad y diseño de la planta.

España cuenta con la participación del 4,2 % de Airbus, y en las plantas españolas se producen los estabilizadores horizontales de todos los modelos de la compañía, por ejemplo.