El Banco de España prevé demanda residencial crezca menos que durante el boom
El Banco de España ha estimado hoy que, pese a la recuperación, los crecimientos de la demanda residencial serán "más modestos" que durante el anterior "boom" de la vivienda, iniciado a finales del siglo XX, en el que esta variable se comportó "de manera muy dinámica".
28 septiembre, 2017 12:12Esto se debe a las perspectivas actuales de evolución moderada de la población en España en el medio plazo, según el último informe trimestral de la economía española del Banco de España, hecho público hoy.
Este factor, no obstante, "podría mitigarse" en un horizonte de más corto plazo en la medida en que la crisis pudo retrasar la decisión de formación de un hogar por parte de los individuos más jóvenes, un elemento que ahora "estaría revirtiendo" como consecuencia de la mejora del empleo.
En su último informe trimestral, el Banco de España destaca cómo el mercado de la vivienda continuó avanzando en el último trimestre en la senda de recuperación iniciada a comienzos de 2014, tanto en lo referente a precios y compraventas de vivienda como en la iniciación de nuevos proyectos de obra residencial, tras la intensa corrección registrada en los 7 años precedentes.
Así, el organismo ha calculado que la inversión en vivienda ha avanzado en promedio en torno al 1,5 % en tasa intertrimestral entre el cuarto trimestre de 2014 y el tercero de 2017, un ritmo superior al registrado por la construcción en su conjunto, que fue de un 1 % en promedio.
La vivienda ganó peso en la inversión en construcción en este período, hasta situarse en torno al 50 % del total, una cifra en línea con el promedio de las últimas dos décadas.
La evolución reciente refleja, entre otros factores, la progresión favorable del mercado de trabajo y de las condiciones de financiación aplicadas tanto a la adquisición de vivienda por parte de los hogares como a su promoción y construcción por parte de las empresas del sector.
En términos del PIB, el peso de este componente de la inversión se habría situado ligeramente por encima del 4,5 % en 2017, desde el mínimo del 4,1 % observado en 2013, un valor similar al del promedio de los países de nuestro entorno y muy alejado del 12 % alcanzado en 2007, punto álgido de la fase de expansión registrada por el sector antes de la crisis, según el Banco de España.
El precio de la vivienda, que registró una caída del 37 % en términos nominales (del 45 % en términos reales) desde su nivel máximo del tercer trimestre de 2007 hasta el mínimo del primero de 2014, mantiene desde entonces una trayectoria de crecimiento, registrándose un avance acumulado del 16 %, según el último informe trimestral de la entidad.
La Comunidad de Madrid, Cataluña y las Islas Baleares las comunidades autónomas fueron las regiones donde el crecimiento ha sido mayor.
Por su parte, las transacciones de viviendas también reflejan una tendencia al alza desde 2014.
En concreto, en 2016 se registraron unas 455.000 compraventas de viviendas, un 14 % más que en 2015, lo que, no obstante, equivale a un nivel sólo ligeramente superior al 50 % del promedio anual de las llevadas a cabo entre 2004 y 2007 (en torno a 885.000)
Este mejor tono de las ventas se refleja también, aunque con menor intensidad, en el mercado hipotecario, con un moderado aumento del número de nuevas hipotecas desde principios de 2015, en un contexto de reducción gradual del nivel agregado de endeudamiento de las familias.
Por el lado de la oferta, la iniciación de obra nueva residencial también se ha sumado a esta tendencia de mejora, aunque con cierto retraso, en parte debido al elevado stock de viviendas sin vender resultado de la fase expansiva previa.
En cualquier caso, el nivel de iniciación de viviendas es todavía reducido y se encuentra muy por debajo de lo observado durante las primeras fases de recuperación del sector, tras la crisis de principios de los 90, destaca el informe.