Rodrigo Rato, exvicepresidente del Gobierno, exgerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y expresidente de Bankia, ha defendido, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados en el marco la Comisión de Investigación sobre la crisis financiera de España y el programa de asistencia financiera, que el Gobierno del que formó parte fue "muy cuidadoso" en evitar que el déficit por cuenta corriente de la economía española superase el 2,5 % y "se mantuvo por debajo de esa cifra en toda esa legislatura, pero después superó el 9 %".
Y que fue el Ejecutivo presidido por José Luis Rodríguez Zapatero el que aceleró la crisis bancaria en España al abandonar las reformas estructurales e ignorara las advertencias del FMI.
En defensa de su gestión como vicepresidente del Gobierno, hasta 2004, Rato echa balones fuera sobre la creación de la burbuja inmobiliaria, y cree que lo que sucedió fue que la preferencia española por ahorrar a través de la propiedad de una vivienda empezó a satisfacerse y emergió una "demanda embalsada" tras un periodo de altas tasas de paro y tipos de interés elevados.
Profesionalización de las cajas de ahorros
Aún así, destacaba Rato que hasta 2003 la relación entre el crédito y el PIB de la economía española no superó el 120 % y, sin embargo, en los años posteriores se elevó al 210 %, una muestra "evidente" de los riesgos para la estabilidad del sistema financiero y el conjunto de la economía.
Al margen de su etapa como vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía, el también ex director gerente del FMI ha desvelado que esta institución concluyó en 2006 un informe sobre las cajas solicitado desde 2003 por el Ejecutivo de José María Aznar. En ese informe, el FMI recomendaba la profesionalización de las cajas de ahorros y la apertura de estas entidades al mercado de capitales, pero "lamentablemente" no produjo ningún efecto en las autoridades de aquel momento.
Además, ha asegurado que en 2007 el propio FMI llamó la atención a España por los desequilibrios que se apreciaban en el crecimiento del déficit exterior y los representantes españoles aseguraron que "la estabilidad macroeconómica estaba garantizada.
Rato y el Caso Bankia
Rato también comparecerá como expresidente de Caja Madrid y Bankia, entidad de la que salió en mayo del 2012, un día antes de que el Estado decidiera nacionalizarla. Un mes después, el Gobierno pidió a Bruselas el rescate bancario.
Tras su salida de la entidad, la judicialización de la quiebra de Bankia ha abierto varios frentes al que llegó a ser director gerente del FMI. El primero de ellos en ser resuelto, por el uso de 'tarjetas black', se saldó el pasado mes de febrero con una condena de cuatro años y medio de cárcel, aún no confirmada por el Tribunal Supremo.
Actualmente, Rato se enfrenta en la Audiencia Nacional a juicio oral por la salida a bolsa de Bankia en un proceso del que se le acusa de falsedad de cuentas y fraude a los inversores, por los que la Fiscalía solicita cinco años de prisión. También tiene otra causa abierta en la Audiencia Provincial de Madrid, sobre el presunto origen ílicito de su patrimonio, donde es investigado, entre otras cuestiones, por delitos fiscales y corrupción entre particulares.