Por Andrés González

Siemens Gamesa comunicó a la CNMV que el consejo previo a su junta de accionistas, que se celebra a partir de las 1200 horas en la localidad vizcaína de Zamudio, modificó su artículo 33, referido a las transaciones de la compañía con consejeros y accionistas.

Iberdrola quería imponer la obligación de que se presentara un informe de un experto independiente si se producían transacciones significativas con el accionista mayoritario, señalando a Siemens. El reglamento aprobado hoy fija que esto se deberá a hacer tanto con Siemens como con Iberdrola, es decir, con cualquier accionista significativo.

El reglamento modificado contempla que las operaciones recurrentes ejecutadas a precios de mercado puedan ser aprobadas sencillamente por el consejo de administración, previo informe favorable de la comisión de auditoría.

La eléctrica quería que se reputasen todas las operaciones que superaran el 1 por ciento de la cifra de negocio consolidada.

Cuando una transacción sea superior al 10 por ciento de los activos sociales del grupo deberá ser aprobada en junta, según el nuevo reglamento.

Iberdrola y Siemens mantienen desde hace meses una guerra abierta por la gestión del fabricante de aerogeneradores, que ha visto caer su precio en bolsa un 35 por ciento desde que se hiciera efectiva la fusión entre Gamesa y el negocio renovable de Siemens.

Iberdrola reclama más peso en las decisiones pese a tener sólo un 8 por ciento del capital frente al 59 por ciento de Siemens.

El grupo presididio por Ignacio Sánchez Galán ensanchó la brecha entre los dos grandes accionistas del grupo eólico al presentar una adenda a la junta de accionistas en la que reclamaba cambios en la gestión de las operaciones vincualdas y que la sede se quede en España.

Las acciones de Siemens Gamesa caían un 3,1 por ciento el viernes, frente al 1,5 por ciento que bajaba el Ibex, dejándose parte de los avances cosechados esta semana.