Repsol pide a Sánchez "medidas coherentes y razonables" y recuerda que los impuestos indirectos los pagan los ciudadanos
- Imaz pide a la nueva ministra de Energía, Teresa Ribero, trabajar para reducir las emisiones de CO2 sin comprometer la competitividad de la economía.
- La petrolera reitera que quiere ser "parte de la solución" en la transición energética.
España tiene nuevo Gobierno y Repsol, como siempre, cumplirá con "las reglas del juego" como le corresponde. Aun así, la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa pone sobre la mesa posibles cambios en la fiscalidad energética -con potenciales subidas a los impuestos que se aplican a los hidrocarburos-, en línea con el programa con el que el PSOE se presentó a las últimas elecciones.
Ante esto, el consejero delegado de la petrolera, Josu Jon Imaz, ha recordado al nuevo Ejecutivo que en caso de aplicar un alza a los impuestos indirectos que gravan los carburantes "el que paga es el consumidor". "Las administraciones toman decisiones y las empresas las cumplen. Por mi parte, espero racionalidad y progresividad", ha afirmado Imaz en la presentación del nuevo plan estratégico de Repsol.
En este sentido, el ejecutivo se ha referido al aumento propuesto por el Comité de Expertos de la Transición Energética en su informe -el aumento del precio del gasóleo de automoción en un 28,6%, de la gasolina en un 1,8% y del gas natural en un 5,8%- en el marco de una reforma fiscal orientada a que "el que contamine, pague", y lo ha definido como una medida "regresiva". "En las últimas semanas hemos visto informes como el de los 'sabios' que proponían un impuesto a los hidrocarburos para pagar las carreteras", ha agregado.
En su opinión, hoy en día no hay un equilibrio entre la tributación que rige en las diferentes Comunidades, algo que hace que con importantes brechas en la renta, se contribuya, siguendo su ejemplo del pago de las carreteras, en un muy nivel similar. "Me gustaría que las medidas que se tomen sean coherentes y razonables y tengan en cuenta la progresividad fiscal, un valor que debe cumplirse si se quiere tener una sociedad competitiva", ha considerado.
Imaz también ha tenido unas breves palabras para la que será la nueva ministra de Energía, Teresa Ribera. Bajo su punto de vista, es necesario que España apueste por reducir sus emisiones de dióxido de carbono (CO2), pero tiene que lograrlo "con la máxima eficiencia y los menores costes para la industria", además de asegurarse de que no sea el consumidor quien "tenga que pagar costes añadidos".
Imaz ha subrayado en varios puntos de su exposición que desde la petrolera están firmemente comprometidos con las metas medioambientales para las próximas décadas y que Repsol, una empresa "que produce mucho gas, más que petróleo", quiere ser "parte de la solución" en la transición energética. El gas, ha subrayado, "es un vector para reducir las emisiones de CO2 en el mundo".