OHL abrirá su consejo a expertos en construcción para impulsar su recuperación

El objetivo de la compañía controlada por el grupo Villar Mir es "tecnificar" este órgano de gestión e impulsar a la compañía en su "nueva etapa", los dos nuevos años de ajuste que ha programado tras vender el negocio de concesiones y reconvertirse en constructora con el fin de volver a beneficios en 2020.

Así lo anunció el presidente del grupo, Juan Villar-Mir de Fuentes, ante la junta de accionistas, en la que avanzó que esta "nueva fase" arrancará "en unos días", cuando el consejo nombre al nuevo consejero delegado que relevará a Juan Osuna. La compañía bajara a José Antonio Fernández Gallar, actual director Inmobiliaria Espacio, para el que será su cuarto primer ejecutivo en dos años.

Posteriormente, en "próximas semanas", la compañía cambiará su consejo con la incorporación de nuevos vocales independientes de carácter técnico que su Comisión de Nombramientos ya está seleccionando.

Con el fin de poder atraer este "nuevos talento", la junta de OHL aprobó elevar la retribución de los consejeros independientes hasta los 110.000 euros, importe que se puede incrementar hasta 130.000 euros en el supuesto de que añadan otros cargos en comisiones delegadas del consejo.

"No constituye una estridencia, se trata de situar la retribución del consejo, congelada durante diez años, en la media de la otras empresas españolas", explicó Villar-Mir. "Además, contribuirá a atraer buenos y expertos profesionales al consejo", añadió.

La remodelación del consejo y su retribución tendrá lugar después de que la junta de este martes aprobara reducir a diez el número de miembros que lo integran.

Para ello, Mónica de Oriol no fue renovada como consejera independiente y renunció como consejero dominical uno de los hijos del accionista de control, Juan Miguel Villar Mir, Alvaro Villar-Mir de Fuentes.

VILLAR MIR SIGUE "CREYENDO EN LA EMPRESA"

En el caso de esta salida, se registra después de que el grupo Villar Mir haya vendido parte de su participación en la compañía y la situara por vez primera por debajo de la cota del 50%, hasta el 38,3%.

A pesar de ello, el presidente y también hijo de Villar Mir ratificó el compromiso de la familia con OHL. "Seguimos creyendo en la empresa, es objeto de nuestros desvelos y preocupaciones y vamos a seguir dejándonos la piel por ella", aseguró.

Juan Villar-Mir de Fuentes garantizó además que tras los dos "difíciles" últimos años, y la "difícil" venta de Concesiones "se ha logrado dar la vuelta a OHL", y la empresa tiene un "futuro importante".

En este sentido, se refirió al balance saneado y la tesorería de 1.000 millones que resultaron de esta desinversión y al compromiso del grupo de centrarse en el negocio de construcción en los mercados que conoce (Estados Unidos, Latinoamérica, y Europa), en aplicar rigurosos criterios de selección de proyectos y en priorizar la rentabilidad".

A pesar de ello, media docena de accionistas tomaron la palabra durante la asamblea para señalar la situación de la compañía, que encadena dos años en pérdidas y contempla otros dos más de ajuste, la sucesión de primeros ejecutivos y sus retribuciones, y la evolución de la acción.

"Ustedes merecen tarjeta roja", sintetizó uno de estos socios, tras cuyas alocuciones el presidente de OHL mostró su esperanza en "recuperar la confianza de los accionistas que, debido a las dificultades de los últimos años, hayan podido sentirse defraudados o decepcionados".