Buenos Aires, Mar del Plata, Ushuaia, las Cataratas del Iguazú,... si alguna vez has soñado con ir a Argentina, estás de enhorabuena. La devaluación del peso ha provocado un descenso de cerca del 45% de los precios para quienes viajamos desde Europa y las reservas de hoteles son hoy un 10% más baratas que hace un año. La otra cara de este escenario son los argentinos, que salen menos del país y eligen desplazarse dentro de sus fronteras.
En el caso de Brasil, aunque la caída de su moneda ha sido menos pronunciada, los costes son este verano un 25% inferiores a 2017 y los hoteles un 10% más económicos. Los vuelos, que no se han visto afectados por la evolución del tipo de cambio, se sitúan en precios desde 1.300 euros para el trayecto de ida y vuelta Madrid - Río de Janeiro y de poco más de 1.500 euros entre la capital madrileña y Buenos Aires.
La depreciación del peso argentino con respecto al euro, que acumula un 70% en el último año, se ha viso en parte compensada con la fuerte inflación que sufre el país (del 26% interanual), pero aún así supone un 44% de ahorro para el bolsillo de los turistas procedentes de Europa. Esta rebaja ya ha tenido reflejo en las valoraciones registradas en la web de viajes TripAdvisor por los españoles que visitan Argentina, que han alcanzado en junio su puntuación más elevada.
Menos precio, mejor nota
Según ha informado a EL ESPAÑOL Blanca Zayas, responsable de comunicación de TripAdvisor, en junio de 2018 la calificación media global de hoteles, restaurantes y lugares de Argentina para los visitantes españoles ha sido de 4.13 puntos sobre 5, muy superior a la del mismo período en 2017 que era de 3.91 puntos. Con Brasil ocurre algo similar: los viajeros de nuestro país le otorgan una nota de 4.25 que es también la más alta del año y se sitúa unas tres décimas por encima de la del ejercicio anterior, de 3.94 puntos.
Y es que la caída del peso y el real brasileño, cuya génesis se sitúa en la tendencia alcista del dólar (los bonos del tesoro de Estados Unidos a 10 años acarician el 3% de rentabilidad desde febrero de este año) y la consecuente salida de capitales de los países emergentes hacia el Estado norteamericano, fue especialmente acusada a partir del mes mayo, sobre todo en Argentina (de ahí el repunte tan llamativo en las valoraciones de TripAdvisor en junio).
Turistas argentinos, los más perjudicados
Esta circunstancia, tan propicia para los viajeros procedentes de España y el resto de la zona euro, llevó al Gobierno de Macri a solicitar un rescate al Fondo Monetario Internacional (FMI), que se acordó el pasado 8 de junio por 50.000 millones de dólares, el equivalente a casi el 10% del PIB argentino. No obstante, la devaluación del peso no se ha detenido y sus efectos ya afectan a la cifra de turistas argentinos que salen del país.
En junio, el número de pasajeros que tomaron vuelos internacionales se redujo un 4%, según las estadísticas de la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA). Fue el primer descenso de este número, que había mantenido un crecimiento sostenido superior al 11% durante los anteriores 12 meses excepto en mayo, momento en que la tendencia comenzó a invertirse y se registró una variación positiva del 6%.
El descenso fue particularmente acusado para destinos estadounidenses como Nueva York o Miami, y europeos como Madrid (reducción del 3%). Por el contrario, las personas que en el último mes volaron dentro del país fueron un 7% más que en junio de 2017.
Comodidad y simpatía
Más allá de la influencia del tipo de cambio en las cifras del turismo, hay otras circunstancias que han contribuido al aumento de españoles que eligen Argentina como destino. Así lo ha subrayado el presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), Rafael Gallego, en declaraciones a EL ESPAÑOL: "No solo elegimos los lugares que visitamos por dinero, sino también por cuestiones de comodidad y simpatía".
Se refería al acercamiento que se produjo en las relaciones entre ambos países con la llegada al Gobierno argentino de Mauricio Macri hace dos años y medio. Para respaldar esta idea, ha asegurado que el número de españoles que viajan a Argentina ha crecido un 40% desde 2015, con un incremento de 180.000 turistas el año pasado y de un 15% respecto al ejercicio anterior en lo que llevamos de 2018.