Una actriz porno española gana a Microsoft y desaparecerá de Internet
- La multinacional tecnológica se negó a retirar su nombre e imágenes, pero la Agencia de Protección de Datos le ha dado la razón a la afectada.
- Deberá borrar también su nombre artístico.
- El abogado que lucha contra las tecnológicas: “Aún falta ver el último episodio”
El derecho al olvido ha sido el bálsamo perfecto para muchas personas que, por unas razones u otras, quieren desaparecer de Internet. Aparecer en los buscadores más populares como Google o Bing, en ocasiones, es un problema y se están dando muchos casos en los que el principal damnificado quiere huir de la red. Es más, según el informe de transparencia de Google, desde hace cuatro años se han retirado más de 70.000 enlaces.
Uno de los últimos casos en los que una gran tecnológica ha tenido que dar su brazo a torcer y eliminar el nombre de una persona es el de una actriz de cine para adultos. EL ESPAÑOL ha tenido acceso a la resolución en la que la reclamante manifiesta que el buscador Bing (propiedad de Microsoft) aparecen varios enlaces donde constan su imagen, su nombre y su voz.
Esta persona ya no ejerce esta actividad por lo que, según reza en la resolución, “ya no se dedica al cine para adultos, la información que estos contienen es así obsoleta y desactualizada. Adicionalmente, el contenido de los enlaces le perjudica profesionalmente, suponiéndole grandes problemas para encontrar empleo, y también personal y moralmente, ya que lleva una vida distinta, muy alejada de ese sector cinematográfico, sin poder, a causa de los enlaces, rehacer su vida.”
Fue en marzo de este año cuando la afectada abrió diligencias para ‘desaparecer’ de un mundo virtual. La protagonista de esta historia alegaba que se veían vídeos de los años 2011 y 2012. Hasta mayo de 2018 no fue cuando se trasladó la solicitud a Bing (Microsoft).
Microsoft se negó a 'olvidarla'
Pero la multinacional estadounidense interpretó que la actriz no debía ser ocultada de la red. La filial española llevó el caso hasta las oficinas centrales en Estados Unidos. El departamento jurídico declinó la petición puesto que “la información era relativa a una persona con proyección pública”, según consta en la resolución.
Ante la negativa de Microsoft, la afectada acudió a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), con la finalidad de que fuera este organismo quien le obligara a la empresa a atender sus requerimientos. Y fue justo lo que ocurrió puesto que la actriz desaparecerá por completo en Internet.
Según Luis Gervas de la Pisa, abogado de salirdeinternet.com y director del Código del Derecho al Olvido publicado en el BOE, el asunto que ha resuelto la AEPD: “es complejo, pues el propio Tribunal de Justicia de la Unión Europea, en Sentencia de 13 de mayo de 2014, señaló que uno de los límites para conceder o no el derecho al olvido, sería el papel desempeñado por el interesado en la vida pública”, y en este caso, parece que la publicación que se hizo en su momento fue voluntaria.
A su vez, en dicha resolución, la afectada pidió que se suprimiera de cualquier rastreador y se bloquease la búsqueda de su nombre artístico. Algo que también se lo concedió la Agencia Española de Protección de Datos. Para el organismo, “el derecho se aplica a las posibles versiones diferentes del nombre, incluyendo también los nombres familiares o con diferentes grafías”.
En este sentido, el experto consultado por EL ESPAÑOL -ajeno al caso- explica que “la AEPD ha rechazado en numerosas ocasiones las solicitudes que tienen por objeto bloquear información de carácter profesional/publicada voluntariamente por el afectado, o información que se muestra al realizar búsquedas distintas al nombre de la persona. Así, se ha rechazado conceder el derecho al olvido para la búsqueda de dos apellidos de una persona, para la búsqueda de un DNI, el cargo concreto de una empresa perfectamente identificable”.